Colonia fue escenario de una manifestación en contra de la intervención del Ejército turco en el norte de siria.
Colonia fue escenario de una manifestación en contra de la intervención del Ejército turco en el norte de siria.
Alrededor de 30.000 kurdos se reunieron a las orillas del río Rin, en la ciudad alemana, para protestar en contra del presidente Erdogan y de su comportamiento dictatorial, – como lo han descrito -, a raíz del golpe de estado fallido del pasado 15 de julio.
Mil agentes de la Polícia se desplegaron en los alrededores del lugar para evitar enfrentamientos entre kurdos y turcos.
Varios de los manifestantes alzaron banderas con la imagen del líder del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), Abdullah Öcalan, quien está actulamente en prisión. Por el contrario, ningún símbolo que hiciera alusión a este partido fue permitido, ya que el PKK es considerado como una organización terrorista en la Unión Europea y está prohibido en Alemania desde 1993.