La comunidad copta en Egipto celebra este domingo de Pascua en pleno estado de emergencia y con medidas de seguridad reforzadas tras los sangrientos contra dos templos en el norte del…
La comunidad copta en Egipto celebra este domingo de Pascua en pleno estado de emergencia y con medidas de seguridad reforzadas tras los sangrientos contra dos templos en el norte del país. Los ataques del pasado Domingo de Ramos provocaron la suspensión de todos los actos previstos durante la Semana Santa copta a excepción de la misa de este domingo de Pascua, en el que el gran número de cristianos en los templos está acompañado de una destacada presencia de policías y soldados, desplegados en las cercanías de las iglesias por orden del presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi.
“Todos los lugares públicos están vigilados, hay agentes de paisano por todos los lados, divididos en pequeños grupos que se ocupan de áreas concretas para garantizar una rapida intervención en caso de necesidad, que Dios no lo quiera”, explicaba un periodista.
Pocas horas después de los atentados en los que murieron 46 personas el presidente del país declaró tres meses de Estado de emergencia. Desde entonces, militares y los agentes apostados a la entrada de cada iglesia revisan los documentos de identidad de los feligreses, en el cual se indica la religión que profesa cada ciudadano egipcio, y les hacen pasar por un detector de metales antes de acceder a las iglesia.