Las tensiones dividen a la ciudad de Chemnitz, al este de Alemania
En la ciudad de Chemnitz, al este de Alemania, la tensión no deja de aumentar. Una manifestación de la ultraderecha se ha visto interrumpida este sábado cuando varios simpatizantes de izquierda han bloqueado la calle por la que marchaban. La ultraderecha conmemoraba la muerte de un joven, apuñalado presuntamente la semana pasada, por dos inmigrantes. Según cálculos de la policía, unas 6000 personas han apoyado la marcha convocada por el partido ultraderechista Alternativa para Alemania y el movimiento xenófobo Pegida para defender consignas como “nosotros somos el pueblo”. Por su parte, unos 3500 contramanifestantes lanzaban eslóganes como “nazis fuera” o vosotros perdisteis la guerra”.
A pesar del gran despliegue policial para intentar contener a los sectores más violentos de ambos bandos, se han lanzado objetos y se han intercambiado amenazas e insultos, lo que ha obligado a la policía a intervenir.
Frente a este contexto y de forma paralela, cientos de personas encabezados por la alcaldesa de la ciudad se congregaban con un mensaje en el que ponen “el corazón por encima del odio”.
Barbara Ludwig, mayor of Chemnitz (SPD)“Aquí también nos tomamos en serio la paz, hoy que precisamente se cumplen 79 años del inicio de la Segunda Guerra Mundial, declara Barbara Ludwig, la alcaldesa de Chemnitz por el Partido Socialdemócrata (SPD): "Nadie de aquí puede decir que no sabe a dónde nos ha llevado el radicalismo de extrema derecha y el nacionalsocialismo", explica.
El Gobierno alemán teme que esta oleada de violencia racista a raíz del asesinato de un alemán de 35 años y de origen cubano el pasado domingo, reviva los fantasmas del pasado.