La diputada laborista fue asesinada por un hombre de extrema derecha
En el año 2016, durante la campaña de la permanencia del Reino Unido en la UE, Jo Cox, diputada laborista de 41 años, fue asesinada. Le dispararon y apuñalaron varias veces en Birstall, al oeste de Yorkshire.
Thomas Mair, su asesino, fue condenado a cadena perpetua. Durante su ataque Mair gritó: "Gran Bretaña primero".
Jo Cox trabajó en la capital belga durante dos años, fue asistente de la exeurodiputada Glenys Kinnock. Y su hijo también alabó el gesto del pueblo belga:
"Qué gesto tan bonito. A Jo le encantaba vivir en Bruselas y a todos nos gustaba ir a la Ancienne Belgique, un sitio fantástico para escuchar música en directo. Felicidades y 'un grand merci' a la ciudad de Bruselas por hacer esto".
En el primer aniversario de su muerte se llevaron a cabo inumerables homenajes, incluso el Parlamento del Reino Unido colocó una placa con su escudo y la frase "más en común".