El Senado estadounidense confirmó su nominación, con 50 votos a favor y 48 en contra, pese a las denuncias por abusos sexuales.
PUBLICIDADDe nada sirvieron los gritos de indignación dentro del Senado, ni las protestas fuera. Brett Kavanaugh, el candidato de Donald Trump al Tribunal Supremo, fue confirmado por el Senado estadounidense, con 50 votos a favor y 48 en contra, pese a las acusaciones de acoso y abusos sexuales de las que ha sido objeto las últimas semanas.
Hubo protestas en toto el país. En Washington, más de 160 manifestantes fueron detenidos.
"Para mí está claro que al Senado le da igual, se mueve por otros motivos en lugar de la verdad", señalaba Cynthia Lapp, una manifestante.
"Tenía muchas esperanzas, no puedo creer que el Senado nos decepcione de esta manera, después de haber escuchado a la doctora Blasey Ford y haber visto a Kavanaugh y su ira y sus mentiras", Mary Ellsberg, decía otra manifestante.
Pese al encendido debate sobre las denuncias de violencia sexual, privilegios y abuso de alcohol, los partidarios de Kavanaugh siguen siendo fieles. Entre ellos, el presidente Donald Trump, que ha mantenido su apoyo contra viento y marea.
"Esta es una de las razones por las que lo elegí, porque no hay nadie con un pasado tan limpio como Brett Kavanaugh. Es una persona excepcional y me siento muy honrado de haberlo elegido. Estará allí por muchos años, y lo aprecio mucho", dijo Trump.
Kavanaugh, que siempre ha negado las acusaciones de abuso sexual de tres supuestas víctimas, ya ha jurado el cargo como nuevo juez del Supremo, un puesto que es vitalicio, aunque es muy probable que el debate continúe algún tiempo.