Argentina condena a dos exdirectivos de Ford por colaborar con la "guerra sucia" de la dictadura. Es la primera vez que tiene lugar un proceso de este tipo contra exresponsables de una multinacional por su implicación en la represión del régimen militar.
Argentina ha condenado a dos exdirectivos de Ford por colaborar con la "guerra sucia" de la dictadura.
Héctor Francisco Sibilla, exjefe de seguridad de la compañía automovilística, y Pedro Muller, exgerente de manufactura, estaban acusados de haber colaborado en la persecución de los delegados sindicales, varios de los cuales fueron torturados en la misma planta antes de ser llevados a otros centros de detención. La acusación pidió una pena de 25 años de prisión.
Aunque ninguno del centenar de delegados sindicales de Ford murió durante la dictadura, entre 1976 y 1983, solo trece siguen con vida en la actualidad. Se trata de un proceso sin precedentes, ya que es la primera vez que Argentina juzga a exdirectivos de una multinacional por su presunta implicación en los crímenes de lesa humanidad perpetrados durante la dictadura, un oscuro episodio histórico que dejó alrededor de 30.000 muertos y desaparecidos
