¿Mintió Boris Johnson a la reina?

La actualidad sobre el Brexit, siempre cambiante, gira ahora mismo en torno a una supuesta mentira. Pero no una cualquiera, sino una presuntamente hecha a la mismísima reina. Eso es lo que denuncia ahora mismo la oposición británica, que sostiene que el primer ministro habría engañado a Isabel II sobre sus verdaderos propósitos a la hora de cerrar temporalmente el Parlamento.
El Alto tribunal de Escocia, que tachó dicho cierre de ilegal, dictaminó que el propósito de Johnson no era otro que obstaculizar la Cámara, y no el de iniciar una nueva agenda de gobierno como le dijo a la reina. Johnson niega la mayor:
"Rotundamente no, no mentí a la reina", aseguraba este jueves. "Y de hecho, el Tribunal Supremo en Inglaterra está de acuerdo con nosotros, pero será la Corte Suprema la que decida. Necesitamos un discurso de la reina. Necesitamos seguir adelante y hacer todo tipo de cosas a nivel nacional".
La Operación Yellowhammer
El último acto de los diputados antes del cierre del Parlamento fue el de exigir al gobierno de Johnson la publicación de la llamada Operación Yellowhammer, un informe que teoriza sobre las peores consecuencias que podría ocasionar un Brexit sin acuerdo. Algunas de estas previsiones, según Johnson, son totalmente exageradas:
"Los puertos estarán listos, las comunidades agrícolas estarán listas y todas las industrias importantes estarán listas para un Brexit sin acuerdo", sostiene el primer ministro, que defiende que "este informe consiste simplemente en el trabajo sensato que haría cualquier gobierno para hacer frente a los peores escenarios".
La Operación Yellowhammer es un arma de doble filo para el gobierno. El texto asegura que los planes que están poniendo en marcha harán perfectamente manejable una salida sin acuerdo, si bien desde el mundo de los negocios y desde la opinión pública en general las voces siguen siendo muy escépticas.