La corresponsal de Euronews, Galina Polonskaya, estaba en el avión con el líder de la oposición rusa antes de ser detenido a su llegada al aeropuerto de Moscú
PUBLICIDADLa corresponsal de Euronews, Galina Polonskaya, estaba en el avión con el líder de la oposición rusa, Alexei Navalni, antes de que le detuvieran a su llegada a Moscú.Polonskaya describió el viaje desde Berlín, donde el principal crítico del Kremlin había sido tratado por envenenamiento con agente nervioso novichok, hasta Moscú, donde fue detenido por sorpresa.
Polonskaya ha asegurado que la prensa que estaba esperando a que Navalni y su esposa, Yulia Navalnaya, llegaran al aeropuerto de Alemania para su vuelo, no estaban informados de cómo se iban a desarrollar los acontecimientos.
Se dirigieron al avión flanqueado por guardias de seguridad donde el resto de los pasajeros ya habían embarcado. Una vez dentro, Navalni parecía relajado bromeaba con los periodistas durante el vuelo. Cuando un compañero de viaje le dio un pequeño oso de chocolate, sugirió con humor que podría estar envenenado.
Alguien le gritó preguntándole si tenía miedo de ser arrestado, él se rió y respondió: "¿Yo, arrestado? ¿Por qué debería ser arrestado?"
El activista ha afirmado repetidamente que las autoridades rusas estaban detrás del atentado contra su vida y varios medios han respaldado esta afirmación, pero Moscú ha negado repetidamente la acusación.
Según la periodista de Euronews, cuando se anunció que el avión se desviaba de su destino previsto a otro aeropuerto de Moscú, la atmósfera cambió.
El piloto anunció un retraso de 30 minutos antes de indicar que el avión se dirigía a Sheremetyevo y que no aterrizaría en el aeropuerto de Vnukovo, como estaba previsto, debido a un "problema técnico". Navalni dijo a su equipo que no esperaba que esto sucediera, añadiendo: "Esto demuestra hasta qué punto me tienen miedo".
Partidarios, periodistas y unidades de policía antidisturbios se habían reunido esperándolo en el aeropuerto de Vnukovo. Cuando el avión llegó a Sheremetyevo, Polonskaya se dio cuenta por primera vez de la importancia que su la esposa del opositor tenía para Navalni. Navalnaya había estado con el político durante su recuperación en Alemania.
"Sentí que él sabía lo que iba a pasar", aseguró la corresponsal, refiriéndose a su inminente arresto. Poco después, rodeado de periodistas, el enemigo más prominente y decidido de Putin hizo una declaración en la que descartaba las preocupaciones sobre su arresto: "Sé que tengo razón. No le temo a nada".
Cuando Navalni entró en el aeropuerto fue detenido en el control de pasaportes y encarcelado. La policía fronteriza se negó a responder cuando el opositor preguntó cuál era el motivo de su detención, diciéndole simplemente que se trataba de un "asunto de control fronterizo".
A su abogado y a su esposa no se les permitió ir con él así que, después de darle un beso de despedida a Navalnaya, fue escoltado fuera. El activista pidió a su abogado que lo acompañara, pero los oficiales también rechazaron esa petición.
El servicio penitenciario ruso aseguró que Navalni estaría detenido hasta que un tribunal se pronuncie sobre su caso. No se anunció inmediatamente la fecha de la comparecencia ante el tribunal. El mismo servicio aseguró que intentaría que Navalni cumpliera su sentencia de 3 años y medio.