LA HAYA (Reuters) - La ciudad portuaria de Rotterdam se está preparando para una versión reducida del Festival de la Canción Eurovisión este fin de semana, con una audiencia en vivo limitada, en medio de menguantes pero aún significativas tasas de infección de COVID-19 en Holanda.
"Cuando tomamos la decisión de intentar unir a todos aquí en Rotterdam lamentablemente sabíamos que la pandemia todavía estaría presente. Estamos haciendo todo lo posible para minimizar el impacto", dijo el lunes a Reuters Martin Osterdahl, supervisor ejecutivo del concurso.
Los 39 países participantes y sus delegaciones se someten a pruebas antes de ingresar al lugar. Unos 3.000 seguidores pueden asistir a través de un plan de prueba holandés para eventos durante la pandemia. También deberán presentar un test de COVID-19 negativo.
El fin de semana pasado, los organizadores anunciaron que habían registrado infecciones en miembros de las delegaciones de Polonia e Islandia. Ambas están en cuarentena y a la espera de más pruebas.
"Si un artista da positivo, iremos a la cinta de respaldo", dijo Osterdahl, enfatizando que nadie podrá ingresar al recinto de Eurovisión sin un test negativo.
Holanda albergará este fin de semana la 65 edición del evento, que atrae a una audiencia televisiva de unos 200 millones de personas, después de que el cantante y compositor holandés Duncan Laurence ganara el concurso del 2019 con la canción "Arcade". El festival fue cancelado en 2020 debido a la pandemia.
Las infecciones por coronavirus en Holanda han caído más de una cuarta parte este mes, después de alcanzar su máximo nivel del año en abril.
El ministro de Salud holandés anunció el lunes que el país continuará flexibilizando las restricciones por COVID-19, que implicarán la reapertura el miércoles de parques de diversiones, zoológicos, gimnasios y piscinas al aire libre.
(Reporte de Bart Biesemans; escrito por Stephanie van den Berg; editado en español por Lucila Sigal)