El encuentro entre el primer ministro francés y el Papa estaba previsto para celebrar el centenario de la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Francia y la Santa Sede; pero ambos aprovecharon para hablar del macroescándalo que afecta a 3000 pederastas en la Iglesia francesa.
El primer ministro francés Jean Castex ha sido recibido por el Papa Francisco este lunes en el Vaticano. Un encuentro previsto desde hace tiempo para celebrar el centenario del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Francia y la Santa Sede.
Relaciones que se habían roto a raíz de la ley de 1905 sobre la separación de la Iglesia y el Estado, que establecía el principio de laicidad.
Más allá de este episodio clave en la historia de los dos Estados, el Papa y el primer ministro francés aprovecharon este encuentro para **hablar del reciente informe 'Sauvé' sobre los abusos sexuales cometidos en la Iglesia francesa desde los años 50. **
Un informe que puso de manifiesto la delgada línea que separa el secreto de confesión de la denuncia de actos delictivos.
"Es la Iglesia de Francia la que ha encargado este informe y ha permitido que esta comisión trabaje con total independencia, dotándola de medios materiales. Ahora, corresponde encontrar las soluciones correspondientes. Como todo el mundo sabe, la separación de la Iglesia y el Estado no es en absoluto la separación de la Iglesia y la ley", ha declarado el Primer Ministro francés.
El informe de la Comisión 'Sauvé', el 5 de octubre ha generado una gran consternación en Francia: La investigación llevada a cabo durante 70 años dentro de la Iglesia francesa ha permitido identificar a más de 3.000 pederastas y sobre todo a 330.000 víctimas. El Papa ha expresado varias veces su sentimiento de vergüenza por estos hechos.