Activistas de "Última Generación" tiñeron de negro la Fontana di Trevi de Roma, con un líquido de carbono de origen vegetal. El grupo afirma que la inversión continuada en combustibles fósiles está directamente relacionada con las catastróficas inundaciones que han asolado el norte de Italia.
Activistas del grupo ecologista "última generación" tiñeron de negro la famosa Fontana di Trevi de Roma, con un líquido de carbono de origen vegetal.
El grupo afirma que la inversión continuada en combustibles fósiles está directamente relacionada con las catastróficas inundaciones que han asolado el norte de Italia.
La protesta se produjo en el momento en que la Primera Ministra, Giorgia Meloni, llegaba a Emilia Romaña para visitar las zonas devastadas por las inundaciones, donde murieron 14 personas y más de 36.000 han sido desplazadas.
Estas inundaciones son las peores que se han registrado en Italia en un siglo, con lluvias extremas durante 36 horas, con un nivel de agua de lo que se esperaría se produjera en un periodo de 6 meses.
Advertencia de la catástrofe
'Última Generación' se refirió a un informe del Banco de Italia de principios de mes, en el que advierte que el 23 % de las viviendas italianas corren riesgo de inundación, con un coste potencial de tres mil millones de euros anuales.
Para este grupo ecológico, lo que pasó en Emilia Romaña es una advertencia de lo que puede venir a futuro en Italia si no se detiene la inversión en combustibles fósiles.
Este grupo comenzó a llevar a cabo protestas pacíficas pero disruptivas en Italia el año pasado, instando a los políticos de todos los partidos a hacer del cambio climático su prioridad.
Las protestas en Italia forman parte de una serie de acciones en toda Europa para llamar la atención sobre el cambio climático.