A finales del año pasado, la Asamblea General de la ONU solicitó al tribunal con sede en La Haya que determinara las obligaciones legales de Israel, después de que el país aprobara leyes que, en la práctica, impedían a la agencia operar en el territorio.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) declaró el miércoles que Israel tiene el deber de permitir que la agencia de ayuda de la ONU en Gaza, la UNRWA, preste asistencia humanitaria en el territorio palestino. La Asamblea General de la ONU pidió el año pasado al tribunal, con sede en La Haya, que determinara las obligaciones legales de Israel después de que el país prohibiera de hecho que la agencia, principal proveedora de ayuda al enclave, operara allí.
Israel "tiene la obligación de aceptar y facilitar los planes de ayuda proporcionados por Naciones Unidas y sus entidades, incluido el OOPS", declaró el presidente de la CIJ, Yuji Iwasawa. La opinión consultiva del Tribunal Mundial se produce en un momento en que el frágil alto el fuego en Gaza, mediado por Estados Unidos y que entró en vigor el 10 de octubre, sigue manteniéndose, aunque se ve amenazado por la continua agresión israelí, que según funcionarios sanitarios locales, ha matado al menos a 88 palestinos y herido a más de 300.
Israel ha negado haber violado el Derecho internacional, afirmando que los procedimientos del tribunal son parciales. El país se ha negado a asistir a las vistas en La Haya desde abril. Israel también ha presentado un escrito de 38 páginas para que el tribunal lo examine.
En una declaración escrita, el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí rechazó el dictamen y dijo que Israel "defiende plenamente sus obligaciones en virtud del Derecho internacional". "(No) cooperaremos con una organización que está infestada de actividades terroristas", añadió, en referencia a la UNRWA.
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha calificado la sentencia de "decisión importante" y ha dicho que espera que Israel la acate. "Esta decisión llega en un momento en el que estamos haciendo todo lo posible para impulsar nuestra ayuda humanitaria en Gaza", declaró Guterres a The Associated Press.
"El impacto de esta decisión es crucial para que podamos actuar con la eficacia necesaria ante la trágica situación en la que aún se encuentra la población de Gaza".
La UNRWA tiene, en la práctica, prohibido el acceso al territorio desde enero. La agencia ha sido objeto de críticas por parte del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y de sus aliados de extrema derecha, como el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, quienes sostienen que en la organización de la ONU se ha infiltrado Hamás.
La UNRWA ha rechazado categóricamente esas acusaciones, y la Corte Internacional de Justicia (CIJ) determinó que Israel no presentó pruebas que las respaldaran, explicó Iwasawa. El tribunal también concluyó que la población de la Franja de Gaza ha sido "inadecuadamente abastecida" y recordó que Israel tiene la obligación de garantizar el suministro de "las necesidades básicas de la población local".
Representantes palestinos celebraron la decisión. El embajador de Palestina en Países Bajos, Ammar Hijazi, la calificó como "clara, inequívoca y concluyente", y afirmó que deja a Israel "sin pretexto, sin contexto y sin excusa" para continuar prohibiendo el trabajo de la UNRWA.
En una opinión consultiva emitida el año pasado, el Tribunal afirmó que la presencia de Israel en los territorios palestinos ocupados es ilegal y pidió que se pusiera fin a la misma, así como que se detuviera inmediatamente la construcción de asentamientos. Esta sentencia impulsó el reconocimiento unilateral de un Estado palestino.
Israel condenó la decisión, afirmando que no abordaba los problemas de seguridad del país. Hace dos décadas, el Tribunal dictaminó que el muro de separación de Cisjordania era "contrario al Derecho internacional". Israel boicoteó esos procedimientos, alegando que estaban motivados políticamente.
Las opiniones consultivas tienen un peso jurídico significativo, pero se describen como "no vinculantes", ya que no hay sanciones directas por ignorarlas. La opinión del miércoles es independiente de los procedimientos en curso iniciados por Sudáfrica, que acusa a Israel de cometer genocidio en Gaza. Israel rechaza la acusación de Sudáfrica y la acusa de dar cobertura política a Hamás.