Ginebra acoge, un año más, el Festival de Cine y Foro Internacional sobre los Derechos Humanos (FIFDH). Una cita ineludible para activistas y defensores de los derechos humanos que aúna cine y política.
La soprano Barbara Hendricks, ha sido la madrina de este festival desde su creación, hace ya 20 años, en 2003.
"Se trata sobre todo de gente que no es conocida, que resiste y que milita por los derechos humanos con muy pocos medios", explica Hendricks. "Tenemos la posibilidad de ver sus historias, que nos cuentan que no estamos solos en nuestras luchas. A veces es fácil desesperarse, pero cuando vengo aquí, veo que la gente milita en todas partes, y es extraordinario".
El presidente de Suiza, Alain Berset, también quiso participar, con su presencia, en el prestigioso festival.
"En el cine en general y en la cultura, se transmite un mensaje", opina Berset. "De lo contrario sería decoración. Tiene que haber un contenido, hay que incitar a la reflexión. Un festival sobre los derechos humanos va a contribuir evidentemente a ser un vector importante de reflexión sobre los derechos humanos. De encuentros, de intercambios, de debates".
Un total de 36 películas, siete de ellas internacionales, se presentan a concurso, con temas tan variados como la guerra, las migraciones o el calentamiento global. El certamen concluye el próximo 19 de marzo.