La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, arremetió contra un político francés de "bajo nivel" que exige la devolución de la Estatua de la Libertad, y dice que Francia debería estar agradecida de "no estar hablando alemán ahora mismo".
El político francés Raphaël Glucksmann ha saltado a los titulares por sugerir que Estados Unidos debería devolver la Estatua de la Libertad, ya que, en su opinión, el país bajo el mandato de Trump ya no es digno del monumento ni de los valores que encarna. Glucksmann, miembro del Parlamento Europeo, afirmó en un discurso que algunos estadounidenses "han elegido pasarse al bando de los tiranos."
"Devolvednos la Estatua de la Libertad", dijo Glucksmann el domingo ante los simpatizantes de su partido, que aplaudieron. "Os la regalamos, pero por lo visto la despreciáis. Así que estará bien aquí en casa".
Tras hacerse virales sus comentarios en respuesta a las políticas de inmigración de Trump, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, contraatacó el lunes diciendo que Donald Trump "en absoluto" devolvería la estatua regalada por Francia a Estados Unidos hace casi 140 años. A continuación, calificó a Glacksmann de político de "bajo nivel" e hizo referencia a la Segunda Guerra Mundial.
"Mi consejo para ese político francés anónimo de bajo nivel sería recordarle que es solo gracias a los Estados Unidos de América que los franceses no están hablando alemán en este momento", dijo Leavitt. "Así que deberían estar muy agradecidos a nuestro gran país", agregó.
Críticas a los recortes de Trump en la Administración pública
Glucksmann también criticó la decisión de la Administración Trump de despedir a empleados del Gobierno federal como parte de los recortes de costes del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) encabezado por el multimillonario Elon Musk.
"La segunda cosa que vamos a decir a los estadounidenses es: 'Si quieren despedir a sus mejores investigadores, si quieren despedir a todas las personas que, con su libertad y su sentido de la innovación, su gusto por la duda y la investigación, han hecho de su país la primera potencia mundial, entonces vamos a darles la bienvenida'", dijo Glucksmann.