Cada vez más voces, tanto a nivel político como a nivel de expertos, considera que un "no acuerdo" es posible en las negociaciones sobre el "brexit"
PUBLICIDADEl pesimismo gana terreno en las negociaciones sobre el “brexit”.
La idea de que el divorcio entre Londres y Bruselas podría zanjarse con un “no acuerdo” se impone ante la falta de avances concretos en las negociaciones.
Y el negociador europeo, Michel Barnier, afirma que sabrá afrontar el reto. “El no acuerdo no responde a nuestro guión de trabajo, pero estamos preparados para ello. Sólo quienes ignoran o quieren ignorar los beneficios de ser miembro de la Unión Europea pueden decir que el no acuerdo sería una solución positiva”, ha dicho.
Entre los políticos europeos también se impone la idea de que un “no acuerdo” es posible. “Tenemos que prepararnos para todas las hipótesis y si no hay avances, me temo que tendremos que plantearnos la idea de que no haya acuerdo”, ha declarado Didier Reynders, ministro de Exteriores belga.
La primera ministra británica, Theresa May, está cada vez más aislada, incluso en el seno de su propio gobierno. Y eso hace difícil avanzar en las tres cuestiones pendientes: la factura del divorcio, los derechos de los ciudadanos de la Unión Europea que residen en Reino Unido y viceversa, y la frontera irlandesa.
Por ello, los expertos empiezan a considerar que pasar a la segunda fase de las negociaciones será extremadamente difícil. “Y en caso de que esa hipótesis se confirmara”, afirma Janis Emmanouilidis, experto de Centro de Estudios Europeos de Bruselas, “ambas partes podrían encontrarse al borde de un precipicio sin un acuerdo al que aferrarse. Y eso creará inmensos problemas”, concluye.