No solo Hungría, Bulgaria y la República Checa piden exenciones para no perjudicar gravemente su economía. El primer ministro belga De Croo señala que es necesario el apoyo de los ciudadanos en los difíciles tiempos que se avecinan.
PUBLICIDADSe empieza a dudar de la capacidad de la Unión Europea para acordar un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, el sexto por su invasión de Ucrania.
A los 27 se les sigue atragantando el embargo al petróleo ruso. Hungría es uno de los países que se oponen con más firmeza a esta medida, por su gran dependencia de este combustible, más barato.
El primer ministro Viktor Orbán se queja de que las sanciones en vigor ya están dañando la economía de su país. Pide más tiempo y más dinero de la UE, incluido el acceso al Fondo de recuperación que Bruselas le retiene por "preocupaciones relacionadas con la corrupción".
"Necesitamos más respuestas a nuestras preocupaciones"
El primer ministro belga Alexander De Croo ha puntualizado a Euronews que Hungría no es el único país que busca dispensas, aunque piensa que el acuerdo es factible.
"Creo que es posible conseguirlo, pero necesitamos respuestas a las preocupaciones, que considero legítimas. Estas preocupaciones no son solo las de Hungría, son preocupaciones de todos los ciudadanos europeos. La política exterior solo puede sobrevivir si tu clase media es todavía capaz de defenderla. Contar con el apoyo de nuestra población es importante porque me temo que estamos ante un largo período de inestabilidad y debemos asegurarnos de que la gente no sufra demasiado".
La República Checa, Eslovaquia y Bulgaria también piden ayuda económica. El primer ministro búlgaro Kiril Petkov alega que los cambios llevan su tiempo.
"No puedes construir una refinería de la noche a la mañana"
**"No puedes construir una refinería de petróleo o un nuevo oleoducto de la noche a la mañana.**De todas formas, Bulgaria apoyaría totalmente un consenso general. Solo queremos que se nos conceda una excención especial hasta que podamos gestionar una alternativa. Hemos demostrado que aplicamos con firmeza algunas de las medidas que ya se han tomado, como la congelación de reservas bancarias de la Federación Rusa".
La guerra en Ucrania y las sanciones contra el petróleo ruso centrarán la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los próximos lunes y martes. Según fuentes comunitarias, por mucho que se busque el acuerdo no piensan suavizarlas tanto como para diluir su fuerza. Mantienen que se tomarán el tiempo que haga falta para conseguirlo.