El Pontífice apareció por sorpresa en la Misa Jubilar por los enfermos y el mundo sanitario. El Papa Francisco agradeció, una vez más, al personal sanitario la ayuda prestada durante su hospitalización.
El Papa Francisco llegó por sorpresa el domingo por la mañana a la plaza de San Pedro del Vaticano, durante la misa especial por el Jubileo de los enfermos y el mundo de la salud. Era su primera aparición pública desde que abandonara hace quince días el policlínico Agostino Gemelli, donde estuvo hospitalizado más de un mes a causa de una neumonía bilateral.
El Pontífice, sentado en una silla de ruedas y con almohadillas en la nariz para respirar, levantó las manos para saludar a la multitud, que se puso en pie y aplaudió mientras era llevado ante el altar de la plaza. "Buen domingo a todos", dijo Francisco. "Gracias de todo corazón". La voz del pontífice sonaba más fuerte que cuando se había dirigido a los fieles desde el balcón del policlínico.
Antes de asistir a la misa, informó la oficina de prensa del Vaticano, el Papa Francisco se unió a la peregrinación jubilar de los enfermos y del mundo sanitario. A continuación, el Pontífice recibió el Sacramento de la Reconciliación en la Basílica de San Pedro y se reunió en oración y pasó por la Puerta Santa.
Papa Francisco: "Rezo por los trabajadores sanitarios víctimas de agresiones"
En la oración del Ángelus, escrita por el Papa Bergoglio y leída por el arzobispo Rino Fisichella, Francisco volvió a dar las gracias a los médicos y al personal sanitario. "Queridos, como durante mi hospitalización, también ahora en mi convalecencia siento el 'dedo de Dios' y experimento su caricia solícita. En el día del Jubileo de los enfermos y del mundo sanitario, pido al Señor que este toque de su amor llegue a los que sufren y anime a los que cuidan de ellos. Y rezo por los médicos, enfermeros y personal sanitario, a los que no siempre se ayuda a trabajar en condiciones adecuadas y a veces son incluso víctimas de agresiones".
"Su misión no es fácil y debe ser apoyada y respetada. Espero que se inviertan los recursos necesarios en tratamientos e investigación, para que los sistemas sanitarios sean inclusivos y estén atentos a los más frágiles y a los más pobres", escribió el Papa.
Además, el Pontífice hizo extensivo su mensaje en su cuenta de X: "Queridos médicos, enfermeras y personal sanitario, mientras cuidáis de vuestros pacientes, el Señor os ofrece constantemente la oportunidad de renovar vuestras vidas a través de la gratitud, la misericordia y la esperanza", publicó.
A continuación, expresó su agradecimiento a las reclusas de la cárcel de mujeres de Rebibbia, que enviaron una tarjeta de pronta recuperación. "Rezo por ellas y por sus familias", escribió el Pontífice, pidiendo después por la paz en los territorios afectados por las guerras y deseando más ayuda para Myanmar y Haití.