El proyecto europeo COMPOSE aúna conocimientos interdisciplinares y buenas prácticas acreditadas para ayudar a los responsables de las ciudades pequeñas y medianas a afrontar la crisis climática y la transición a las energías renovables.
A 700 metros sobre el nivel del mar, Anogeia es uno de los pueblos habitados más altos de Creta. Las temperaturas bajo cero no son infrecuentes. La calefacción es una necesidad para los 2.000 residentes, muchos de los cuales dependen del turismo y el pastoreo para ganarse la vida.
Hace apenas una década, la mayoría de los hogares seguían utilizando chimeneas tradicionales. Estas llevaban el humo al interior, contaminaban el aire y contribuían a la deforestación de las montañas circundantes. Ante el aumento de las necesidades energéticas, la preocupación por el medio ambiente y los efectos de la crisis económica griega, el ayuntamiento empezó a buscar alternativas que fueran sostenibles y rentables.
Anogeia participa en COMPOSE, una iniciativa europea que se desarrolló entre 2016 y 2019 y apoyó proyectos de energías renovables en 11 regiones mediterráneas. El programa se centraba en ayudar a los municipios pequeños y medianos a superar obstáculos clave como la escasez de personal y de financiación, así como la falta de conocimientos técnicos necesarios para elaborar y aplicar planes de energía sostenible.
La iniciativa se financió principalmente a través de la política de cohesión europea, que cubrió casi el 75% de su presupuesto de 2,5 millones de euros. Su principal objetivo era impulsar el uso de energías renovables y reducir las emisiones de CO2 en el Mediterráneo, una región que se calienta un 20% más rápido que la media mundial.
Muy cerca, la ciudad costera de Rétino también colaboró con COMPOSE para abordar los desafíos de sostenibilidad provocados por el rápido crecimiento urbano. La ciudad introdujo un sistema de recogida de aceite de cocina usado que transforma estos residuos en biocombustible. También instaló paneles solares para alimentar el ayuntamiento y estaciones de carga para vehículos eléctricos.
"Creo que proteger el medioambiente es una responsabilidad colectiva. Nadie debe dar por sentado que otro hará el trabajo", declaró a Euronews George Marinakis, alcalde de la ciudad.
En la actualidad, el legado del proyecto COMPOSE sigue vivo a través del conjunto de recursos COMPOSE, una plataforma web que mantienen Stavroula y sus estudiantes en el Laboratorio de sistemas energéticos renovables y sostenibles de la Universidad de Creta.
Esta caja de herramientas, que sirve tanto de repositorio de datos como de guía práctica, ofrece a municipios y partes interesadas un planteamiento sencillo, paso a paso, para adaptar las estrategias de mitigación del cambio climático a las realidades locales.