Los países europeos van muy por detrás de Rusia y Ucrania en lo que respecta a su tecnología de drones. Aún así, los expertos consideran que los 27 no deberían reaccionar de forma exagerada ante los recientes incidentes bélicos con Rusia.
Europa no debería reaccionar de forma histérica ante las recientes incursiones de drones, según ha declarado a 'Euronews' el director adjunto de investigación del GLOBSEC GeoTech Center, un 'think tank' sobre seguridad centrado en Europa.
Recientemente se han registrado incidentes en Polonia, Dinamarca, Rumanía y Estonia. Más de una docena de drones violó su espacio aéreo en este primer país, mientras que en Dinamarca se cerró el aeropuerto de Copenhague como consecuencia de un incidente similar. Sin embargo, la ministra finlandesa de Asuntos Exteriores, Elina Valtonen, ha declarado que Europa no debe alarmarse y Alexandr Burilkov, de GLOBSEC, se muestra de acuerdo.
"Esto ha ocurrido con regularidad, especialmente durante la Guerra Fría. Y sin embargo, ¿volvió a estallar una guerra? No. Mantener la cabeza fría y ser pragmático ante estos incidentes creo que es crucial", dice Burilkov, añadiendo: "La lección que deberían enseñarnos es que no hay que reaccionar de forma histérica. Se trata simplemente de estar preparados, por si acaso. No se trata de ignorar que puede haber una amenaza".
La Unión Soviética era mucho más poderosa de lo que la Federación Rusa podría aspirar a ser, afirma el directivo de GLOBSEC. Entonces se produjeron incidentes rutinarios en puntos geográficos críticos, cuando bombarderos soviéticos y aviones soviéticos con capacidad nuclear invadieron el espacio aéreo de Alaska.
"Durante ese periodo, más tenso que el actual, se produjeron todo tipo de incidentes sin que se llegara nunca a una guerra abierta; deberíamos recordarlo", dice Burilkov, experto en cuestiones militares y de seguridad en Rusia, China y el espacio postsoviético, así como miembro de la Red Europea de Expertos en Cuestiones de Terrorismo.
La OTAN y Europa, muy por detrás de Rusia y Ucrania en producción
'Euronews' se ha puesto en contacto con Burilkov para analizar la iniciativa de la UE sobre el conocido como muro de los drones. La semana pasada, la Comisión Europea lanzó esta red de detección y respuesta a lo largo del flanco oriental de la UE. Supuestamente, este sistema detectaría y destruiría los drones sospechosos que entrasen en la UE.
Esta iniciativa reúne a diez Estados miembros: Bulgaria, Dinamarca, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía, Eslovaquia y Finlandia. También cuenta con la participación de Ucrania, el país con las capacidades más avanzadas en materia de drones en Occidente. La OTAN, por último, también se ha unido al plan defensivo. "Aunque llevamos más de tres años de guerra, la OTAN sigue siendo relativamente débil en materia de drones en comparación tanto con Ucrania como con Rusia", explica el experto en seguridad. "Los ucranianos tienen la ventaja de su ecosistema de innovación, que es más flexible. Pero ambos están muy por delante de Europa".
Según Burilkov, Europa debe tener en cuenta dos factores a la hora de poner en marcha la iniciativa defensiva aérea. En primer lugar, el rápido desarrollo del sector de los drones, seguido por la cuestión de la producción en serie. "Se puede iterar sobre ellos mucho más rápido que sobre otros sistemas porque son pequeños y fáciles de fabricar. Si quieres mejorar un tanque, un buque de guerra o un avión es un gran esfuerzo que lleva años".
El otro problema es una cuestión de capacidad de producción. El uso de drones en Ucrania por ambas partes del conflicto es tremendo. "Todavía no tenemos esa capacidad y por eso necesitamos el muro de drones, para poder construirlos en cantidades tan grandes que empiecen a marcar la diferencia", añade Burilkov. El experto cree que Europa necesita crear capacidades flexibles, ya que toda la industria se desarrolla a gran velocidad.
"Estas cosas cambian muy deprisa. Por eso no tiene sentido comprar drones que son lo mejor que hay ahora mismo y luego almacenarlos porque ¿seguirán siendo eficaces dentro de unos años? Tiene más sentido seguir una doble vía: por un lado, aumentar la capacidad de producción para poder ampliarla en caso necesario y, por otro, mantenerse a la vanguardia de la innovación en materia de drones. Así que no interesa comprometer tu Defensa por completo con un sistema que podría estar obsoleto en unos años, o al menos ser menos eficaz de lo que es hoy", explica el director adjunto.
Burilkov también señaló que el desarrollo de drones debe integrarse en los avances militares tradicionales. "No podemos limitarnos a comprar aviones no tripulados y luego decir: vale, ahora ya no necesitamos tanques, artillería, etcétera. Hay que tomar los drones e integrarlos como parte de las capacidades tradicionales. De lo contrario, acabas teniendo una fuerza militar que tal vez tenga drones, pero que también es muy frágil porque no tiene todo este otro tipo de metal pesado de tanques y artillería trabajando juntos como operaciones combinadas".
Los diferentes protocolos en Europa plantean obstáculos
Otro de los retos del muro de los drones será que cada Estado miembro tiene políticas diferentes a la hora de neutralizarlos. "En Alemania, los drones interrumpen a menudo los entrenamientos militares. Y si se trata de un dron, quizá puedas neutralizarlo, pero a lo mejor no. Y si ocurre en una zona poblada, como con estas intrusiones en aeropuertos de Dinamarca, ni siquiera puedes empezar a dispararle sin arriesgarte a causar daños colaterales", dice Burilkov.
Europa también puede aprender del incidente de Polonia, cree este experto. Algunos de los drones provenientes de Bielorrusia fueron derribados por aviones militares, mientras que otros se estrellaron tras quedarse sin combustible.
"Los polacos acabaron utilizando jets para derribarlos, es decir, misiles muy caros. Al parecer, uno de los misiles no alcanzó su objetivo y cayó en una zona poblada, lo que no es ideal. Y algunos de los drones, de todos modos, no fueron detectados y acabaron estrellándose tras quedarse sin combustible. Va a ser difícil desarrollar tanto una política unificada en toda la UE, incluida la cooperación transfronteriza, como una tipología sobre cómo responder a los distintos tipos de drones".
Hungría no es ajena al muro de los drones
La Comisión Europea parecía reacia a incorporar a Eslovaquia y Hungría, dos países del flanco oriental con estrechos vínculos con Rusia, a la iniciativa. Tras la adhesión de Eslovaquia, Hungría también recibió una invitación como último país de la región. Según Burilkov, existe una divergencia entre la política exterior húngara, con lazos con Rusia y China, y su Defensa, orientada hacia Occidente.
"El Gobierno húngaro está plenamente comprometido con la compra exclusiva de material militar europeo, lo que es bastante singular para los estándares europeos. Y esto, por supuesto, ha dado sus frutos a la hora de atraer a Hungría a la industria europea de Defensa: Rheinmetall tiene en Hungría una gran planta de producción de tanques Leopard. También está preparada para producir este nuevo obús sobre ruedas RCH-155", ejemplifica Burilkov.
"Esto crea una situación interesante en la que, mientras que la política exterior de Budapest puede no estar siempre en sintonía con el resto de la Unión Europea, desde la perspectiva de la contribución a la seguridad europea, los húngaros van más allá en algunos aspectos". Burilkov concluye que, en términos de capacidades, el Ejército húngaro está en buena forma. Y en caso de conflicto, podrían contribuir de forma muy significativa a la defensa del flanco oriental.