La agencia Frontex informa de un descenso del 22% en las entradas irregulares a la Unión Europea durante los nueve primeros meses de 2025. Sin embargo, el coste humano sigue siendo trágico: 1.328 personas murieron o desaparecieron en las rutas mediterráneas.
Las entradas irregulares en la Unión Europea disminuyeron un 22% en los nueve primeros meses de 2025, según Frontex, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas del bloque. El descenso más acusado se registró en la ruta de África occidental, que experimentó una caída del 58% en los cruces irregulares, con solo 734 detecciones en septiembre.
Las rutas de los Balcanes occidentales y las fronteras terrestres orientales también registraron un descenso de los cruces irregulares del 47% y el 36%, respectivamente. Los expertos sugieren que los conflictos mundiales e incluso en el medio ambiente podrían ser la causa de la ralentización general de los cruces irregulares.
"El descenso general puede estar relacionado con varios factores, en particular el estallido o el cese de luchas o conflictos, la incertidumbre política, una cooperación más estrecha en el control de fronteras, pero también las condiciones meteorológicas", afirmó Helena Hahn, analista política del Programa Europeo de Migración y Diversidad del Centro de Política Europea (EPC).
Sin embargo, añadió que las cifras no deben entenderse como un menor número de personas en general en movimiento. "Al contrario, el número de migrantes internacionales ha aumentado desde 2020, al igual que el de desplazados forzosos. Simplemente no están llegando a Europa al mismo ritmo que inmediatamente después de la pandemia del COVID-19", dijo Hahn.
No obstante, otras rutas siguen siendo importantes focos de actividad, mientras que otras siguen registrando aumentos. El Mediterráneo central es la ruta más transitada, con casi el 40% de todas las entradas irregulares de este año.
Libia es el principal punto de partida de esta ruta, registrando un aumento del 50% de las salidas en comparación con 2024. La mayoría de los migrantes que siguen esta ruta proceden de Bangladesh, Eritrea y Egipto.
En la ruta del Mediterráneo occidental, las travesías irregulares aumentaron un 28%, y solo en septiembre las llegadas se incrementaron en más de la mitad. Las salidas desde Argelia representaron casi tres cuartas partes de las detecciones en esta ruta este año.
"Los mayores esfuerzos de prevención de Marruecos han empujado a más personas a buscar servicios de contrabando en Argelia", afirma el informe de Frontex. "Esto ha dado lugar a una cooperación más estrecha entre las redes de contrabando argelinas y marroquíes y al desplazamiento de algunas operaciones a territorio argelino".
Más de 1.000 muertos y un alto coste humano
A pesar del descenso general, el coste humano sigue siendo elevado. En 2025, 1.328 migrantes murieron o desaparecieron mientras utilizaban las rutas mediterráneas, y la mayoría de los identificados eran hombres, según la base de datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
La ruta del Mediterráneo central es la más mortal de todas, con 895 personas muertas o desaparecidas. La principal causa de muerte es el ahogamiento. Muchos migrantes han intentado viajar legalmente y han optado por hacerlo de forma irregular solo después de que se les denegara el visado.
"Detrás de estos migrantes desaparecidos hay familias y comunidades que buscan respuestas y hacen frente a su ausencia", afirma el informe de la OIM 'Families of Missing Migrants'.