El 23 y 24 de noviembre, los ciudadanos de Campania, Apulia y Véneto acudirán a las urnas para elegir a sus nuevos gobiernos regionales en una cita que pondrá a prueba la fortaleza del Ejecutivo de Giorgia Meloni y marcará el rumbo político de Italia.
Italia se prepara para una prueba decisiva para la resistencia del Gobierno de Giorgia Meloni y, al mismo tiempo, para el futuro político del país. El domingo 23 y el lunes 24 de noviembre, los ciudadanos de tres regiones clave (Campania, Apulia y Véneto) acudirán a las urnas para elegir al próximo gobernador y renovar los respectivos consejos regionales.
"El lunes ganaremos las elecciones y no sólo derrotaremos a Cirielli, sino que derrotaremos a Meloni y al Gobierno del que Cirielli es viceministro. Queremos ganar para decir que podemos gobernar bien y para construir un programa también para 2027 y enviar a Meloni a casa", declaró Roberto Fico, candidato a la presidencia de Campania por el centro-izquierda.
Las palabras del expresidente de la Cámara y exponente del Movimiento 5 Estrellas reflejan la dimensión nacional que han adquirido estas elecciones regionales. Los principales temas en juego también forman parte del debate político italiano a escala estatal y anticipan los ejes de la campaña para las elecciones generales de 2027.
El centro-derecha busca mostrar cohesión y demostrar que los tres años de Gobierno Meloni han consolidado en los italianos la voluntad de otorgarle un nuevo mandato. El centro-izquierda, por su parte, afronta un examen crucial de su "campo amplio" para construir una alternativa sólida y creíble que pueda desafiar al actual Ejecutivo, después de la derrota electoral de 2022.
Otro tema crucial es la creciente abstención. En las últimas citas electorales, cada vez menos votantes han acudido a las urnas, reflejo de una desconfianza creciente en las instituciones que trasciende cualquier identidad política.
Fico y Cirielli se enfrentan por sanidad y amnistía
En Campania, la contienda entre Roberto Fico, candidato de centro-izquierda y figura del Movimiento 5 Estrellas, y Edmondo Cirielli, candidato de Fratelli d'Italia y viceministro del Gobierno Meloni, ha adquirido un marcado tono nacional. El relevo del presidente saliente, Vincenzo De Luca, se juega entre acusaciones cruzadas y propuestas enfrentadas.
En las últimas semanas, los líderes nacionales de ambos bloques han respaldado activamente a sus candidatos. El debate se ha centrado en dos cuestiones: la amnistía urbanística y la polémica sobre un barco del expresidente de la Cámara.
Fratelli d'Italia, a iniciativa de un senador de Campania, ha presentado una enmienda a la "maniobra 2026" para reabrir la amnistía sobre la construcción aprobada en 2003 por el Gobierno Berlusconi. Cirielli respalda esta propuesta, mientras que Fico la rechaza tajantemente y acusa a su rival de "hacer guiños a la ilegalidad".
"La amnistía se negó entonces sólo a los habitantes de Campania. Creo que la izquierda hace 'caciara' porque sabe que es una injusticia que ellos han infligido voluntariamente a los ciudadanos en los diez años que han gobernado la región de Campania", afirmó Cirielli en una entrevista con 'Libero'. "Tenemos razón y queremos devolver al pueblo de Campania un derecho arrebatado y pisoteado por el Partido Democrático. Recuerdo que el Tribunal Constitucional ha rechazado la línea de Campania sobre la amnistía de 2003, pero parece que a nadie le importa por aquellos lares".
La polémica sobre el barco de Fico también ha alimentado el debate. Fratelli d'Italia presentó una pregunta parlamentaria pidiendo verificar la legalidad del amarre de su embarcación Paprika en el puerto de Nisida. "Lo hice todo con la máxima transparencia. Estamos hablando de un gozzo usado de 2001, comprado y amarrado regularmente", respondió Fico.
En materia sanitaria, uno de los temas más sensibles en Campania, Fico propone reforzar la sanidad pública, combatir el clientelismo y mejorar la gestión de recursos. "Las prioridades serán la asistencia sanitaria, en primer lugar la proximidad territorial, y el apoyo a los discapacitados y a las personas con problemas de salud mental. Partiremos de ahí", declaró a 'Il Fatto Quotidiano'.
Cirielli propone garantizar asistencia "a 30 minutos de casa" y reducir a la mitad los tiempos de espera. En el ámbito laboral, Fico, que fue uno de los impulsores de la renta de ciudadanía durante los gobiernos Conte, propone un subsidio de ámbito regional. Cirielli, en cambio, defiende un "plan para el empleo" basado en formación obligatoria y colaboración con empresas y centros educativos.
"Para mí es una gran responsabilidad dirigir la región de Campania en caso de victoria (…) intentaremos hacerlo de la mejor manera posible", afirmó Fico en su cierre de campaña en Nápoles.
Debate intenso en Apulia
En Apulia, donde el centro-izquierda gobierna desde hace dos décadas, el debate interno sobre el sucesor de Michele Emiliano ha sido intenso. El elegido finalmente es Antonio Decaro, exalcalde de Bari y eurodiputado del Partido Democrático, con el apoyo del M5S, Verdes–Izquierda, Acción, Italia Viva, Più Europa y tres listas cívicas.
"Me gustaría una Puglia institucional que se ocupara de las fragilidades del territorio y sobre todo de las fragilidades sociales de nuestra región", afirmó Decaro durante el último debate con sus rivales. El centroderecha presenta al empresario Luigi Lobuono, expresidente de la Feria del Levante, respaldado por FdI, Lega, Forza Italia y Noi Moderati.
El gran tema de la campaña es la antigua Ilva, una de las mayores plantas siderúrgicas de Europa. Recientemente, han aumentado las tensiones entre sindicatos y Gobierno por el plan del Ejecutivo Meloni, que prevé indemnizaciones por despido para hasta 6.000 trabajadores, descarbonización en cuatro años y nuevos inversores.
A día de hoy, el fondo de despido afecta a 4.450 empleados, 3.800 de ellos en Apulia, de una plantilla de unos 10.000. Los sindicatos temen que el plan acelere el cierre definitivo. El Gobierno defiende la reforma como una operación "de ciclo corto" destinada a acelerar las obras y convertir a Italia en el primer país europeo en producir solo acero verde.
Decaro aboga por la nacionalización de la planta, mientras que Lobuono respalda la línea del Gobierno. "Este compromiso (…) confirma la seriedad y determinación con la que el Gobierno afronta un conflicto muy complejo que los gobiernos anteriores ni siquiera habían intentado resolver", declaró.
Los otros candidatos son Ada Donno (lista Popular Pacifista Puglia) y Sabino Mangano (Alleanza Civica per la Puglia), que propone el cierre definitivo de la planta.
Véneto: el desafío del post-Zaia
El Véneto afronta el reto de elegir al sucesor de Luca Zaia, figura destacada de la Liga que logró un 80% de los votos en 2020 y fue protagonista del debate sobre el tercer mandato. Finalmente, el centroderecha unido ha optado por Alberto Stefani como candidato, apoyado por Lega Stefani Presidente, FdI, Forza Italia, UDC, Noi Moderati–Civici per Stefani y Liga Veneta Repubblica.
El centro-izquierda presenta a Giovanni Manildo, respaldado por PD, AVS, M5S, Le Civiche Venete per Manildo, Rifondazione, Uniti per Manildo y Volt.
La Autonomía Diferenciada es el eje central del debate. "Creo que combinar poder y responsabilidad es fundamental", afirma Manildo. "De las 23 materias que pueden ser objeto de Autonomía (…) hay que entender cuáles nos pueden hacer dar un salto cualitativo".
"Fui ponente del proyecto de ley marco sobre la Autonomía, que es fundamental para el camino institucional de nuestra región", recuerda Stefani. "El gran reto de la Autonomía es éste: ser más responsable ante sus ciudadanos".