Caminar a paso ligero aumenta la frecuencia cardíaca, mejora la circulación, reduce la tensión arterial y, además, ayuda a perder peso.
Las personas mayores no necesitan llegar a un número alto de pasos al día para obtener beneficios importantes para su salud cardiovascular, según un nuevo análisis. Las mujeres mayores que caminaron al menos 4.000 pasos uno o dos días por semana registraron un riesgo de muerte un 26 % menor que las que nunca alcanzaron esa cifra, según el estudio. También presentaron un riesgo de enfermedad cardiovascular un 27 % inferior.
Los beneficios fueron aún mayores entre las mujeres que alcanzaron ese umbral al menos tres días por semana, con un 40 % menos de riesgo de mortalidad global y un 27 % menos de riesgo de enfermedad cardiovascular. Caminar a buen ritmo puede aumentar la frecuencia cardíaca, mejorar la circulación, reducir la presión arterial y ayudar a perder peso.
El estudio, publicado en el 'British Journal of Sports Medicine', incluyó a más de 13.500 mujeres mayores en Estados Unidos, con una edad mediana de unos 71 años. Los investigadores les entregaron dispositivos para contar pasos y siguieron su salud durante los diez años siguientes.
Según el estudio, el total de pasos acumulados durante la semana parecía ser más importante para la salud cardiovascular que el número de días en los que se movían. Esto sugiere que se puede obtener beneficio tanto si se hacen caminatas largas una o dos veces por semana como si se camina un poco cada día.
I-Min Lee, una de las autoras del estudio y epidemióloga en la Universidad de Harvard, señaló que los resultados son importantes porque las personas mayores suelen ser menos activas físicamente.
"Debido al bajo número de pasos que damos hoy, es cada vez más significativo determinar la cantidad mínima de actividad física necesaria para mejorar la salud y poder ofrecer al público objetivos realistas y alcanzables", dijo Lee en un comunicado.
Las conclusiones se suman a las que desmontan la meta, tan repetida, de 10.000 pasos diarios para una salud óptima. Un estudio publicado en agosto, por ejemplo, concluyó que la gente empieza a notar los beneficios en torno a 7.000 pasos diarios.
A ese nivel, las mujeres del último estudio empezaron a observar rendimientos decrecientes en términos de salud cardiovascular. El riesgo de enfermedad fue un 16 % menor que en las mujeres que nunca alcanzaron los 7.000 pasos.
Rikuta Hamaya, docente de Medicina en la estadounidense Mass General Brigham y coautor del estudio, afirmó que a las mujeres mayores debería aconsejárseles caminar al menos 4.000 pasos uno o dos días por semana para mejorar su salud cardiovascular.
"Si logramos promover que las mujeres mayores den al menos 4.000 pasos una vez por semana, podríamos reducir la mortalidad y el riesgo de enfermedad cardiovascular en todo el país", dijo Hamaya.