Sucedió en la autopista 360, en el norte de Texas. Un volquete se estrelló y empezó a arder, después de intentar esquivar a un coche que retrocedió inesperadamente ante una barrera de peaje. El gran vehículo acabó empotrándose contra los guardarraíles.
El conductor del coche resultó herido, pero no de gravedad. Sorprendentemente el camionero salió ileso del accidente.