En el AquaRio de Río de Janeiro, buzos con orejas de conejo distribuyeron huevos especiales a los animales marinos como parte de un evento temático de Pascua, ofreciendo una experiencia atractiva para los visitantes tanto bajo el agua como en tierra. Más allá del espectáculo, el acuario utilizó el evento para concienciar sobre el consumo sostenible de pescado.
Con la demanda de pescado tradicionalmente en aumento durante la Semana Santa, especialmente el Viernes Santo, AquaRio instó al público a evitar especies en peligro de extinción como el surubí manchado y los meros. Estos peces, vitales para los ecosistemas oceánicos, están protegidos por la ley brasileña.