La operación es la segunda de este tipo que se lleva a cabo este fin de semana, y la tercera en menos de dos semanas. El Gobierno de Trump asegura de nuevo que se trataba de un buque que intenta sortear las sanciones internacionales.
La Guardia Costera de EE.UU. ha interceptado a un tercer petrolero cerca de Venezuela en el mar Caribe, según recogen medios estadounidenses. El Gobierno asegura que el buque forma parte de una presunta flota clandestina venezolana utilizada para eludir las sanciones. El estado del buque es desconocido y no está claro aún si transporta realmente crudo venezolano, según ha declarado un trabajador de la Casa Blanca ante la 'CNN'.
El buque, que navegaba en aguas internacionales y aledañas al país caribeño, está sujeto a una orden judicial de incautación, ha afirmado un trabajador gubernamental anónimo. El domingo, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció en Telegram la "campaña de agresión que va desde el terrorismo psicológico hasta los corsarios que atacan petroleros", añadiendo: "¡Estamos listos para acelerar el paso de nuestra revolución profunda!"
Maduro ya aseguró durante el anterior abordaje que dichas acciones no quedarían impunes y que las denunciaría ante el Consejo de Seguridad de la ONU. El Pentágono y el Departamento de Seguridad Nacional, que supervisa a la Guardia Costera estadounidense, remitieron las preguntas sobre la operación a la Casa Blanca, que aún no ha hecho declaraciones públicas al respecto.
La tercera operación de este tipo en menos de dos semanas
EE.UU. incautó otro petrolero con bandera panameña llamado Centuries el pasado sábado, y un petrolero sancionado llamado Skipper el 10 de diciembre. El motivo de la incautación del Centuries es menos claro que el del Skipper: este último no enarbolaba bandera de ningún país y, al parecer, formaba parte de una flota clandestina que transportaba material comercial sancionado.
Sin embargo, el historiador marítimo Salvatore Mercogliano afirma que las bases de datos marítimas muestran que el Centuries parece legal. "Todo indica que se trata de un buque debidamente registrado", ha declarado este experto, aunque añadió que probablemente transportaba petróleo sancionado.
La Administración Trump anunció la semana pasada un "bloqueo" de todos los petroleros sancionados que entren o salgan del país, como "compensación" de todos los activos incautados a las petroleras estadounidenses hace años. "El presidente Trump ha sido claro: el bloqueo permanecerá en pleno vigor hasta que la empresa criminal de Maduro devuelva cada activo estadounidense robado", ha declarado el secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth, en X.
Estados Unidos también ha atacado buques que, según afirma, trafican con fentanilo y otras drogas, con al menos 104 muertos en 28 ataques conocidos desde septiembre. Los ataques se han enfrentado al escrutinio de congresistas estadounidenses y activistas de derechos humanos, entre otros críticos, quienes afirman que faltan pruebas y que las muertes equivalen a ejecuciones extrajudiciales.