Los suizos han rechazado en referéndum la renta básica para todos, aunque para muchos es el inicio del sueño de un nuevo mundo.
Los suizos han rechazado en referéndum la renta básica para todos, aunque para muchos es el inicio del sueño de un nuevo mundo.
El 76,9% de los suizos ha dicho No a la creación de una renta mínima de 2.300 euros al mes para todos los residentes. El 23,1% ha votado a favor.
Para el empresario de Basilea y precursor de la iniciativa, Daniel Häni, y los que la apoyan se trata de una victoria.
“Más del 20% significa que una de cada cinco personas con derecho a voto ve esto correcto, la tendencia está lanzada y se pone en marcha la idea”, ha dicho Daniel Häni.
Uno dei padri del #redditodibase Daniel Häni si dice “positivamente sorpreso”. 22% di sì, un risultato “favoloso” https://t.co/TooznSZ8tN
— swissinfo.ch (@swissinfo_it) 5 de junio de 2016
(Uno de los precursores de la iniciativa Daniel Häni dice estar “positivamente sorprendido”. Un 22%, resultado “fabuloso”) “Creo que el resultado ya está ahí hoy, pero está en la gente, en las sonrisas, en la imagen que transmite esta bonita fiesta. Es una emoción positiva, una idea de ganas de cambio, de una nueva sociedad”, ha señalado un partidario de la renta básica universal durante la fiesta celebrada en Basilea.
La iniciativa, poco clara y más bien destinada a alimentar el debate, sólo estaba apoyada por el partido de los Verdes, el resto de formaciones políticas y el Gobierno consideraban el proyecto utópico y demasiado caro. Habría que aportar 22.000 millones de euros al año adicionales a las arcas públicas para hacerlo posible.