Decenas de familias, separadas por la frontera entre México y Estados Unidos, se reunieron este domingo para poder disfrutar de unos minutos cara a cara.
El tramo de Sunland Park, entre México y Estados Unidos, fue el escenario del reencuentro entre decenas de familias que viven separadas desde hace mucho tiempo. En un lado están los llamados "dreamers", jóvenes que llegaron a Estados Unidos cuando eran menores de edad. Al no tener la ciudadanía temen abandonar el país y no poder volver después, por lo que no pueden visitar a sus familiares.
"No queremos que nos arreglen a nosotros y a nuestros papás no", decía una joven. "Porque ellos fueron los 'dreamers' originales y ellos hicieron un acto de amor al traernos, sin saber qué podría pasar al dejar a su familia. Ellos se vinieron con muchas fuerzas y ahora es mi turno de luchar por ellos".
"Uno quisiera toda la vida estar con sus hijos, disfrutándolos. Estar sufriendo junto a ellos y no que uno esté aquí sufriendo su ausencia y ellos la de uno".
En septiembre, Donald Trump acabó con el decreto creado por Obama en 2012 que daba un estatuto legal a estos jóvenes. Unos 700.000 "dreamers" podrían empezar a ser deportados del país a partir de marzo al no tener la nacionalidad estadounidense. Algo que demócratas y parte de republicanos intentan evitar.