En su nuevo informe, el FMI coloca la invasión rusa de Ucrania como la causa principal del freno en el crecimiento europeo, aunque considera que España no nota el impacto tanto como otros países energéticamente más dependientes de Rusia, como Alemania e Italia.
El Fondo Monetario Internacional rebaja su previsión de crecimiento económico global, siendo la guerra en Ucrania la principal culpable.
En su nuevo informe también rebaja a un punto su estimación para España, que será del 4,8 %. aunque la sitúa como la economía avanzada que más crecerá este año. Alemania e Italia se verán más afectadas por su dependencia energética de Rusia.
Así, el Fondo estima un crecimiento para Alemania del 2,1 % en 2022, 1,7 puntos por debajo de su estimación anterior, y del 2,3 % para Italia, un punto y medio por debajo del que preveía antes. Para la zona euro el Fondo prevé un crecimiento del 2,8 % este año, 1,1 puntos menos al que calculaba en enero.
Son precisamente Alemania e Italia los países que más influyen en el cambio de previsiones para el conjunto de la zona euro, según este informe, que coloca a España como la primera de las grandes economías del euro en lo que a aumento del producto interior bruto se refiere.
"En comparación con nuestras previsiones de enero, hemos corregido a la baja nuestra proyección de crecimiento mundial al 3,6 % tanto para 2022 como para 2023. Esto refleja el impacto directo de la guerra en Ucrania y las sanciones a Rusia, con ambos países proyectados a experimentar fuertes contracciones", detalla Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del FMI.
El FMI proyecta una inflación en la zona euro del 2,3 % para este año. Para España calcula una tasa del 5,3 % que bajará drásticamente en 2023 a 1,3 %.