Incapacidad del G20 para acordar un comunicado conjunto sobre la guerra en Ucrania

Un minuto de silencio en honor de las víctimas del terremoto en Siria y Turquía fue un raro momento de unidad en la cumbre de ministros de Asuntos Exteriores del G20 en Nueva Delhi.
El jefe de la diplomacia española da por hecho que no habrá acuerdo conjunto por la postura de Rusia en la guerra de Ucrania, "negando su ilegalidad y no escuchando los llamamientos a la paz".
Serguéi Lavrov se reunió con su homólogo chino, Qin Gang. Sobre la mesa se encuentran la ayuda militar solicitada por Rusia y que China se resiste a proporcionar, y el plan de paz hecho público por Pekín hace unos días y que Moscú consideró prematuro.
Su homólogo estadounidense, Antony Blinken, ya ha declarado que no estaba prevista ninguna reunión con ellos... Tras una gira por varios países de Asia Central, se reunió en Dehli con el jefe de la diplomacia brasileña.
Ha sido un frenesí de reuniones que contrasta con la pausada reflexión del primer Ministro de la India, Narendra Modi:
"La experiencia de los últimos años - crisis financiera, cambio climático, pandemia, terrorismo y guerras - muestra claramente que la gobernanza global ha fracasado".
Narendra Modi hizo un llamamiento a la unidad para hacer frente a los numerosos retos que afronta el planeta. El líder indio quería dedicar la cumbre a temas como el desarrollo de los países más pobres o el cambio climático, pero la guerra en Ucrania domina los debates.
En búsqueda de la paz
Los ministros de Exteriores de Rusia y China, Serguéi Lavrov y Qin Gang, debatieron en un encuentro bilateral al márgen del G20 en la India, según informó la diplomacia rusa.
"Serguéi Lavrov y Qin Gang debatieron la situación actual en torno a Ucrania, incluyendo la posición del Ministerio de Exteriores de China sobre la solución política a la crisis ucraniana, conversaron sobre una serie de temas internacionales actuales", afirmó Exteriores en una nota.
Por su parte, Qin Gang, afirmó que su país "siempre estará del lado de la paz, promoverá activamente negociaciones por la paz y jugará un rol constructivo" en la guerra de Ucrania.
En un mismo tono, la ministra de Exteriores francesa, Catherine Colonna, urgió a que el grupo "apele a una paz justa y duradera" en Ucrania, una guerra que consideró carecer de "justificación y basada en mentiras".
Entre armas y sanciones
Además, los ministros de Rusia y China denunciaron a los países occidentales por utilizar el "chantaje y las amenazas" para imponer sus puntos de vista, según la diplomacia rusa.
Lavrov y Gang, "rechazaron unánimemente los intentos de interferir en los asuntos internos de otros países, de imponer planteamientos unilaterales mediante el chantaje y las amenazas", indicó la diplomacia rusa en un comunicado.
Lavrov también instó ante sus homólogos del G20 a poner fin a las sanciones unilaterales, incluidos los precios tope al crudo ruso, y a las violaciones a la libertad de comercio internacional.
"Es necesario poner una barrera a las sanciones internacionales, a todas las formas de violación de la libertad de comercio internacional, a la manipulación de los mercados, a la imposición de tope a los precios y a otros intentos de apropiarse de recursos ajenos", subrayó.
Al ser preguntado por la postura de su país si China decide enviar armamento a Rusia, el ministro neerlandés de Asuntos Exteriores, Wopke Hoekstra, advirtió que "habrá consecuencias":
"Lo que es de vital importancia es que todo el mundo se abstenga de ayudar a Rusia a armarse, pues habrá consecuencias si algunos países cruzan esa línea", declaró Hoekstra en un encuentro con medios en los márgenes del foro, al ser preguntado por la postura de su país si China decide enviar armamento a Rusia.
Durante su intervención, la ministra francesa Colonna enfatizó que la invasión "ha violado todas las leyes de la guerra y de la humanidad. El G20 debe responder claramente, como ya hizo durante la cumbre de Bali y en la Asamblea de Naciones Unidas".