Prosiguen los ataques rusos en la región de Jersón. Mientras el presidente Putin se reune con la plana mayor en el Distrito Militar del Sur en Rostov del Don.
El río Dniéper se ha convertido en un frente clave con tropas ucranianas y rusas a ambas orillas. Tras la reconquista de la ciudad de Jersón por parte de Ucrania en noviembre del año pasado, las fuerzas rusas todavía controlan franjas de territorio en la orilla opuesta y siguen bombaando ciudades y pueblos de los que se retiraron.
Dos civiles ucranianos mueren en la región de Jersón
En la región de Jersón un hombre murió por fuego de artillería rusa en Kindika, según informó el gobernador Oleksandr Prokudin.
Otro ataque dejó una persona muerta y cinco heridos en Novoraisk, un pueblo de la misma zona, añadió más tarde.
"Bombas de fósforo, bombas de destellos acumulativos, metralla y munición normal. Es un fuego caótico, por lo general no tienen tiempo suficiente para apuntar, pues están tirando a todo en un área", declara un sargento del ejército ucraniano, bajo el sobrenombre de "Vozhd".
Putin se reúne con la plana mayor en la sede del Distrito Militar del Sur en Rostov del Don
El presidente Putin ha vistado la sede del Distrito Militar del Sur en Rostov del Don, por segunda vez en menos de un mes cerca de la frontera con Ucrania.
Putin se ha reunido con el ministro de Defensa, Serguéi Shoigu y el jefe del Estado Mayor, Valeri Gerásimov.
En la base fue informado sobre nuevos modelos de equipamiento militar, según las agencias de noticias rusas. Es segunda visita a la base en menos de un mes.
Portavoz del Kremlin reafirma que Rusia necesita alcanzar sus objetivos en la operación en Ucrania.
"El presidente Zelenski y el régimen de Kiev han estado prometiendo frenéticamente éxitos militares. Deberían darse cuenta de que no conseguirán una victoria en el campo de batalla. Cuanto antes se den cuenta de eso, antes podrían surgir las condiciones para un acuerdo", declaraba Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin.
Desde hace una semana, prosiguen los ataques rusos con drones y armas de precisión contra instalaciones militares, según fuentes rusas.