Arieh Herzog, exdirector de Defensa de Misiles, ha asegurado que "nunca hay ningún sistema de armas que sea 100% exitoso".
En Israel, la gente aguanta la respiración. Desde que el líder de Hamás, Ismail Haniyeh, fue asesinado en la capital iraní, Teherán, esperan un ataque de represalia.
Y por eso, los israelíes han comenzado a prepararse. En Tel Aviv hay señales en las calles que indican dónde están los refugios antiaéreos más cercanos. Las casas nuevas deben tener una habitación del pánico que las proteja contra los cohetes.
"Tengo un refugio al lado de la casa. Si suena la alarma, el Ayuntamiento abrirá el refugio. Luego entramos y esperamos que nos proteja de las bombas", dijo una mujer en la calle. "En primer lugar, esperemos que no pase nada. Pero si pasa algo, iremos al refugio antiaéreo, que está cerca", afirmó un hombre en Tel Aviv.
El sistema antiaéreo "puede fallar", según un exfuncionario israelí
Arieh Herzog, exdirector de Defensa de Misiles, ha asegurado que "nunca hay ningún sistema de armas que sea 100% exitoso". "Creo que más de una capa significa que tienes más oportunidades de interceptar. Pero de vez en cuando puede haber un fallo, y la amenaza alcanzará su objetivo y es muy peligroso".
Hace apenas unos días, el ministro de Asuntos Exteriores iraní confirmó que su Gobierno tiene planes para atacar a Israel en conversaciones con su homólogo húngaro. Los últimos acontecimientos han avivado los temores a una gran guerra en Oriente Medio.