Las fuerzas ucranianas controlan "más de 1.250 kilómetros cuadrados" en la región rusa de Kursk, según Zelenski, aunque su intención declarada de frenar a Rusia con esa incursión no ha impedido los avances del Kremlin en la región de Donetsk, donde se han ordenado evacuaciones masivas en Pokrovsk.
PUBLICIDADEl presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo el lunes que las fuerzas ucranianas continúan su incursión militar en la región rusa de Kursk y hasta el momento "controlan más de 1.250 kilómetros cuadrados" y 92 asentamientos.
Zelenski hizo esas declaraciones durante la reunión de jefes de la Misión Diplomática Exterior de Ucrania, y añadió que el Ejército ucraniano había "capturado el mayor número de prisioneros rusos en una sola operación".
"Nuestra defensa proactiva y preventiva es la forma más eficaz de contrarrestar el terror ruso, y causa importantes dificultades para el Estado agresor", añadió.
Zelenski dijo también que si los aliados de Kiev levantaran las restricciones al uso de armas de largo alcance, Ucrania "no necesitaría entrar físicamente, en particular, en la región de Kursk para proteger a nuestros ciudadanos ucranianos en las comunidades fronterizas y eliminar el potencial de agresión de Rusia".
En su discurso nocturno del domingo, el presidente ucraniano indicó que la incursión en la región rusa de Kursk tenía como objetivo crear una zona de contención para evitar nuevos ataques de las tropas del Kremlin al otro lado de la frontera, con el propósito de desconcertar al mando ruso y obligarle a dividir o desviar recursos militares.
Anteriormente, el mandatario había dicho que la operación buscaba proteger a las comunidades de la región ucraniana limítrofe de Sumy de los bombardeos constantes. Pero sus comentarios del domingo supusieron la primera ocasión en que afirmaba claramente el objetivo de la operación, lanzada el 6 de agosto.
Rusia avanza en Donetsk pese a la incursión ucraniana en Kursk
Los intentos de Kiev de aliviar la presión sobe su frente oriental con la incursión en Kursk no han logrado de momento frenar la embestida rusa en la región ucraniana de Donetsk, donde las autoridades locales dijeron que las fuerzas de Moscú estaban avanzando tan rápido que las familias recibieron órdenes de abandonar la ciudad de Pokrovsk y otros pueblos y aldeas cercanas a partir de este martes. Alrededor de 53.000 personas aún viven en Pokrovsk, según las autoridades, y algunas de ellas decidieron irse de inmediato.
Pokrovsk es uno de los principales bastiones defensivos de Ucrania y un centro logístico clave en la región de Donetsk. Su captura comprometería las capacidades defensivas y las rutas de suministro de Ucrania y acercaría a Rusia a su objetivo declarado de capturar toda la región de Donetsk.