Ante la toma de posesión de Trump este lunes, los líderes europeos destacaron la importancia de mantener fuertes lazos con Washington y la necesidad de adaptarse a posibles cambios en las políticas y acuerdos internacionales.
Los líderes europeos aseguran que pretenden seguir manteniendo fuertes lazos con Washington a pesar de las posibles preocupaciones sobre las políticas y el liderazgo de Donald Trump, que este lunes toma posesión como nuevo presidente de Estados Unidos.
El ministro británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, afirmó que el Reino Unido está comprometido con su "relación especial" con Estados Unidos. "Estamos deseando trabajar con Donald Trump durante los próximos cuatro años", añadió Lammy.
El presidente letón, Edgars Rinkēvičs, dijo que las relaciones entre EE.UU. y Letonia han sido sólidas en el pasado, independientemente del malestar por los retos futuros, como el gasto en defensa, las políticas climáticas y mantener unidos a los países europeos.
"Tendremos un año bastante incierto y turbulento", dijo Rinkēvičs, quien añadió que Europa necesita adaptarse al liderazgo impredecible de Trump, especialmente si Estados Unidos se retira de acuerdos internacionales como el Acuerdo del Clima de París.
El ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noel Barrot, subrayó la necesidad de que Europa establezca límites claros en su relación con Estados Unidos, una señal de que Francia podría estar dispuesta a fijar líneas rojas. Barrot abogó por proteger la "integridad del debate público europeo" y salvaguardar la soberanía europea frente a influencias externas, incluidas las de las plataformas de redes sociales con sede en Estados Unidos.
Aumentan las preocupaciones sobre la injerencia extranjera en la política europea
Los comentarios de Barrot se producen en medio de la creciente preocupación por las intervenciones políticas del multimillonario sudafricano Elon Musk a través de su plataforma de redes sociales X. El apoyo de Musk al partido ultraderechista alemán AfD y sus continuas críticas al Gobierno laborista británico del primer ministro Keir Starmer han amplificado el temor a la injerencia extranjera en la política europea en los últimos tiempos.
El ministro danés de Asuntos Exteriores, Lars Løkke Rasmussen, advirtió de una posible crisis de política exterior si Trump continúa con ideas controvertidas, incluidas las relativas al papel estratégico de Groenlandia. A principios de este mes, Trump afirmó que Dinamarca debería entregar su territorio a Estados Unidos para "proteger el mundo libre", sin excluir la posibilidad de utilizar la fuerza militar para hacerse con el control de Groenlandia.
En respuesta, la primera ministra de Groenlandia, Múte B. Egede, afirmó que Groenlandia quiere afirmar su independencia: "Somos groenlandeses. No queremos ser estadounidenses ni daneses".
Tras la toma de posesión, se espera que Trump actúe con rapidez, firmando órdenes ejecutivas para acelerar las deportaciones, ampliar la producción de combustibles fósiles y debilitar las protecciones de la función pública para los empleados del Gobierno. Trump ha prometido que su presidencia marcará el comienzo de "un nuevo día de fuerza, prosperidad, dignidad y orgullo estadounidenses."