Las restricciones al paso de los camiones humanitarios a Gaza y los nuevos bombardeos israelíes (Hamás estima que Israel ha matado a unos 100 palestinos desde el 10 de octubre, día de la firma de la tregua) provocan el viaje de Steve Witkoff y Jared Kushner a Tel Aviv.
El enviado especial Steve Witkoff y el yerno del presidente de Estados Unidos, Jared Kushner, han llegado a Israel este lunes para monitorizar 'in situ' el inestable alto el fuego entre Israel y Hamás, después de que el Gobierno de Benjamin Netanyahu haya amenazado con detener definitivamente los camiones de ayuda humanitaria. Israel afirma que los militantes de Hamás han matado a dos de sus soldados.
El Ejército israelí ha asegurado, no obstante, que sigue aplicando el alto el fuego y que las entregas de ayuda se han reanudado este lunes, pero no hay confirmación hasta el momento de esta última aseveración. Mientras tanto, Hamás estima que Israel ha violado el acuerdo 80 veces, según la Oficina de Medios del Gobierno en Gaza, matando al menos a 97 palestinos e hiriendo a casi 230 desde la firma del acuerdo hace diez días.
El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró el domingo a bordo del Air Force One que Hamás ha estado "bastante alborotado" y "han estado haciendo algunos disparos", sugiriendo que la violencia podría ser culpa de los "rebeldes" de la organización y no de sus dirigentes, en referencia a los grupos paramilitares enfrentados con Hamás por controlar la Franja. La semana pasada surgieron vídeos de militantes de Hamás ejecutando, presuntamente, a miembros de estos grupos rivales.
Continúa la violencia en Rafah
El domingo, el Ejército israelí afirmó que varios militantes de Hamás habían disparado contra sus tropas en zonas de la ciudad de Rafah controladas por Israel con base en las líneas de alto el fuego acordadas. Hamás ha asegurado que la comunicación con las unidades que le quedaban en Rafah lleva meses cortada y que "no se hacen responsables de ningún incidente que se produzca en esas zonas".
Se espera que las próximas fases del alto el fuego se centren en el desarme de los paramilitares gazatíes, la retirada israelí de las zonas adicionales que controla en Gaza y la futura gobernanza del devastado territorio. El plan estadounidense propone el establecimiento de una autoridad provisional controlada por diplomáticos internacionales.
En una entrevista concedida a '60 Minutes' este fin de semana, Jared Kushner afirmó que el éxito o el fracaso del acuerdo dependerá de si Israel y el mecanismo internacional son capaces de crear una alternativa viable a Hamás. "Si tienen éxito, Hamás fracasará y Gaza no será una amenaza para Israel en el futuro", afirmó el yerno de Trump.
Mientras tanto, una delegación de Hamás encabezada por su negociador jefe, Khalil Al Hayya, permanece en El Cairo para hacer un seguimiento de la aplicación del acuerdo de alto el fuego con los mediadores y otros grupos palestinos.
También preocupa la cantidad de ayuda que Israel está dejando entrar en Gaza, que forma parte del acuerdo. Tras la firma del 10 de octubre, Israel solo dejó pasar a la mitad de camiones humanitarios (300 de 600 diarios) acordados en el pacto de alto el fuego. La situación al respecto permanece incierta en estos momentos.