Un nuevo misil de crucero ruso plantea un problema a la OTAN. Los expertos occidentales están preocupados: el misil Burevestnik tiene un alcance de hasta 5.500 kilómetros y la ojiva puede equiparse con distintos tipos de munición, incluida la nuclear.
Al parecer, la nueva superarma de Vladímir Putin, Burevestnik, ya está lista. Al parecer, este misil con capacidad nuclear puede volar en círculos durante horas, eludir cualquier sistema de defensa y, por tanto, suponer una amenaza de gran alcance.
Una apreciación respaldada, al menos en parte, por los análisis de los servicios de inteligencia occidentales. Un Burevestnik operativo sería una pesadilla estratégica para Europa. Si se confirma que Rusia está desplegando realmente el sistema, la OTAN se enfrentaría a un nuevo factor de riesgo casi incontrolable. El hecho es que
La superarma está clasificada como especialmente preocupante por la OTAN -así lo afirma ahora un documento clasificado de la OTAN, que habla de un misil de crucero de propulsión nuclear "Burewestnik" ("Petrel") con el nombre en clave de la OTAN SSC-X-9 Skyfall.
El documento procede del departamento de inteligencia de la alianza militar, informa Die Welt. En él, los expertos examinan el arsenal modernizado de las llamadas fuerzas nucleares estratégicas rusas.
Hace tres semanas, el líder del Kremlin, Vladímir Putin, anunció públicamente eléxito de las pruebas del misil de crucero.
Según el documento de la OTAN, el misil de crucero alcanza una velocidad de más de 900 kilómetros por hora. Es muy maniobrable, tiene un gran alcance y puede lanzarse desde sistemas móviles. Esto le permitiría dar largos rodeos y eludir así la defensa antiaérea de la OTAN. Según la OTAN, "los desafíos existentes (...) se verían aún más exacerbados por el extremo alcance y maniobrabilidad" del misil, afirma el documento.
¿Qué puede hacer el Burevestnik?
La característica más destacada del Burevestnik es su reactor nuclear. A diferencia de los misiles de crucero convencionales (que funcionan con parafina, combustibles sintéticos o sólidos y sólo tienen un alcance limitado), este sistema de propulsión utiliza energía nuclear, lo que teóricamente confiere al misil un alcance casi ilimitado.
Esto significa que el Burewestnik puede recorrer decenas de miles de kilómetros sin repostar, permanecer en el aire durante largos periodos de tiempo, cambiar de rumbo y atacar objetivos desde cualquier dirección. Puede evitar los sistemas de misiles, incluso sobre regiones australes y polares donde la vigilancia es mínima.
Sin embargo, algunos expertos señalan que el misil de crucero no alcanza velocidades hipersónicas, por lo que se vuelve más vulnerable cuanto más tiempo permanece en el aire.
Los expertos de la OTAN también están estudiando un nuevo misil móvil de alcance medio procedente de Rusia, el SS-X-28 Oreshnik. Se probó por primera vez en Ucrania en noviembre de 2024, pero se sabe poco sobre los detalles técnicos. A los expertos occidentales les preocupa especialmente su alcance de hasta 5.500 kilómetros y la posibilidad de equipar la ojiva con diversas municiones, incluidas las nucleares.
El documento afirma: "La capacidad de atacar objetivos en cualquier lugar de Europa, combinada con la gran movilidad del lanzador, garantiza un alto índice de supervivencia. La falta de claridad sobre las ojivas desplegadas plantea problemas de Defensa a la OTAN".
Bielorrusia despliega el Oreshnik
Bielorrusia desplegará en diciembre el misil hipersónico ruso de alcance medio Oreshnik. Los preparativos para ello están, por tanto, a punto de concluir. Así lo informó la agencia de noticias rusa Tass, citando a Natalia Eismont, portavoz del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko. Según Lukashenko, el despliegue responde a la escalada por parte de Occidente.
Según el documento de la OTAN, los submarinos Poseidón también plantean un problema y se espera que estén operativos en 2030. Se dice que tienen un enorme alcance y presumiblemente han sido diseñados para "destruir bases navales, puertos y ciudades costeras en el Pacífico, en la costa este de Estados Unidos y en el Reino Unido y Francia".
También son "difíciles de detectar y atacar cuando operan en aguas profundas". Especialmente explosivos: la OTAN carece actualmente de "torpedos antisubmarinos con la velocidad y el alcance necesarios" para combatir eficazmente a los submarinos Poseidón.
El documento deja claro que la OTAN tiene déficits, sobre todo en el medio y largo alcance, especialmente con armas nucleares.
Pero también hay expertos que restan importancia al Burevestnik, por ejemplo: Incluso si Rusia consiguiera hacer funcionar de forma fiable el reactor nuclear de su "Petrel", seguiría siendo cuestionable que el misil de crucero ofreciera alguna ventaja significativa al arsenal ruso.
Fabian Hoffmann, investigador asociado del Proyecto Nuclear de la Universidad de Oslo, llegó a calificar el Burevestnik en X de arma "inútil y superflua".
Según los observadores, cinco científicos rusos murieron en 2019 durante una prueba del Burevestnik en un emplazamiento militar. Varios empleados fueron arrojados al mar. Todavía no está claro si hubo víctimas mortales por radiación. Posteriormente se midió un aumento de la radiación radiactiva en los alrededores.
El diseño, un reactor nuclear combinado con un arma nuclear, ya había sido rechazado por EE.UU. en la década de 1950 debido a sus incalculables riesgos.
Según William Alberque, Asociado Principal del Foro del Pacífico y antiguo Director de la OTAN para el Control de Armamentos, Desarme y No Proliferación Nuclear, el riesgo más grave surgiría en caso de lanzamiento: si un Burevestnik fuera alcanzado, el material radiactivo de su reactor nuclear podría esparcirse por una amplia zona - "como un mini Chernóbil en el cielo".
Sin embargo, el experto nuclear independiente Pavel Podvig se mostró cauto en sus comentarios a 'DW': "Yo sería cauto a la hora de afirmar que se trata de un Chernóbil volante. Si hubiera habido un escape de radiación radiactiva, se habría notado". Por tanto, un accidente del misil durante el despegue o en vuelo sería probablemente más arriesgado.