La última encuesta de gestores de fondos de Bank of America muestra una rotación récord de la renta variable estadounidense a la europea, impulsada por el estímulo fiscal alemán.
Los inversores están realizando un brusco giro de Estados Unidos a Europa, apostando a que la era del excepcionalismo estadounidense ha tocado techo, mientras se posicionan a favor de un resurgimiento europeo, impulsado en gran medida por el estímulo fiscal de Alemania y el aumento del gasto en Defensa.
La última encuesta de gestores de fondos de Bank of America, realizada por los analistas Andreas Bruckner y Sebastian Raedler, ha revelado la rotación más significativa de la renta variable estadounidense a la europea desde que se iniciaron los registros en 1999.
Un 39% neto de los gestores de fondos tiene ahora una posición sobreponderada en renta variable europea, frente al 12% del mes pasado y el nivel más alto desde mediados de 2021.
Al mismo tiempo, un 23% neto de los inversores afirma estar infraponderado en renta variable estadounidense, frente a un 17% neto sobreponderado en febrero. Esto supone un cambio de 40 puntos porcentuales en la asignación a la renta variable estadounidense en un mes, el mayor registrado hasta la fecha.
¿Por qué se alejan los inversores de la renta variable estadounidense?
Durante años, Wall Street ha dominado los mercados bursátiles mundiales, impulsado por el fuerte crecimiento económico y la innovación tecnológica. Sin embargo, esta hegemonía está siendo cuestionada, ya que el 69% de los gestores de fondos cree que la era del "excepcionalismo estadounidense" ha llegado a su fin.
El cambio se debe en gran medida a la creciente preocupación por las perspectivas económicas estadounidenses. Un sorprendente 83% de los inversores espera ahora que el crecimiento estadounidense se ralentice, frente al 28% del mes pasado, el mayor deterioro de la confianza en años.
Aunque los temores a una recesión profunda siguen siendo limitados, el 64% de los gestores de fondos todavía prevé un aterrizaje suave, muchos se preparan cada vez más para un estancamiento económico o una leve estanflación, en particular a medida que la Administración Trump persigue aranceles más altos y amenaza con una guerra comercial mundial.
El estímulo alemán y el gasto europeo en Defensa impulsan el optimismo
La economía europea, a menudo criticada por su lento crecimiento y sus obstáculos burocráticos, se ve ahora como un punto brillante. El 60% de los inversores espera un mayor crecimiento europeo para el próximo año, frente al 9% de hace dos meses. Esta fuerte mejora se ve impulsada por las medidas de estímulo fiscal anunciadas recientemente por Alemania y el aumento del gasto europeo en Defensa.
Alemania, la mayor economía del continente, se ha comprometido a impulsar el gasto fiscal para reactivar el crecimiento. En cambio, las expectativas de crecimiento mundial se han deteriorado. Un 44% de los gestores de fondos prevén ahora una ralentización de la economía mundial, lo que supone un aumento significativo desde el 2% del mes pasado.
¿Qué sectores se benefician?
A medida que el capital gira hacia Europa, los inversores aumentan su exposición a los valores financieros e industriales. Los bancos y las aseguradoras siguen siendo los sectores más sobreponderados, y los industriales registran importantes ganancias de posición, probablemente impulsados por las expectativas de un mayor gasto en Defensa.
Los valores de pequeña capitalización también están atrayendo un renovado interés, con un 37% neto de inversores que esperan que los valores de pequeña capitalización superen a los de gran capitalización, el mayor nivel de optimismo para este segmento en más de tres años.
Un 50% neto de los encuestados prefiere los valores cíclicos a los defensivos, frente al 28% del mes pasado, lo que refleja las expectativas de una aceleración económica en Europa.
El comercio minorista, los medios de comunicación y los automóviles siguen siendo los sectores más infraponderados, mientras que los valores europeos de tecnología, medios de comunicación y comercio minorista se consideran sobrevalorados. Por el contrario, los sectores del automóvil, la energía y los recursos básicos se consideran infravalorados.
Alemania sigue siendo el mercado de renta variable preferido
Entre los mercados bursátiles europeos, Alemania sigue siendo el más favorecido, lo que refleja las expectativas de que el estímulo fiscal impulse la expansión económica. Italia ha subido al segundo puesto, superando a Francia, mientras que Suiza y España son los mercados menos preferidos.
A pesar de las fuertes entradas, algunos inversores se muestran cautos sobre cuánto puede durar el repunte europeo. Aunque un 67% neto sigue viendo perspectivas alcistas para los valores europeos durante el próximo año, esta cifra es inferior al 76% del mes pasado, lo que indica que el optimismo se ha enfriado ligeramente.