El presidente de EE.UU. advirtió que impondrá nuevos aranceles y restricciones a las exportaciones de los países que aplican impuestos digitales a las grandes tecnológicas de Estados Unidos, en una amenaza que apunta a la UE y al Reino Unido.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con imponer más aranceles y restricciones a las exportaciones de países que, según él, atacan injustamente a las empresas tecnológicas estadounidenses.
"Los impuestos digitales, la legislación sobre servicios digitales y la regulación de los mercados digitales están diseñados para perjudicar o discriminar a la tecnología estadounidense", escribió Trump en su red social, Truth.
Afirmó que se aplicarían aranceles "sustanciales" si los países no "mostraban respeto" a las empresas tecnológicas estadounidenses, y añadió que los impuestos "dan un pase completo a las mayores empresas tecnológicas de China". El presidente Trump no se refirió a ningún país por su nombre, aunque sus comentarios podrían interpretarse como una crítica a la Ley de Mercados Digitales (DMA) y la Ley de Servicios Digitales (DSA) de la UE.
La DMA pretende garantizar una competencia leal impidiendo que las grandes plataformas digitales monopolicen el mercado. La UE ha identificado a Alphabet, Amazon, Apple, ByteDance, Meta y Microsoft como los denominados "guardianes", es decir, empresas con una posición atrincherada en el mercado. La DSA, por su parte, pretende impedir las actividades ilegales y perjudiciales en línea y la difusión de desinformación.
El Reino Unido también tiene un impuesto sobre los servicios digitales, junto con varios Estados miembros de la UE como Francia, Italia y España.
Desestabilizar acuerdos frágiles
La postura de Trump amenaza con deshacer los avances logrados con los socios europeos para reducir las fricciones comerciales. La semana pasada, la UE y EE.UU. avanzaron en su pacto comercial, anunciado inicialmente el 27 de julio, afirmando que abordarían las barreras injustificadas a los negocios transatlánticos. El acuerdo allana el camino para reducir los aranceles sobre bienes y sectores específicos.
Aun así, el bloque de los 27 se mostró reacio a hacer concesiones en materia de normativa digital. "Hemos dejado muy claro a Estados Unidos que los cambios en nuestra normativa digital, en concreto la Ley de Mercados Digitales y la Ley de Servicios Digitales, no estaban sobre la mesa", declaró la Comisión Europea en un comunicado.
El Reino Unido también se planteó recortar su impuesto del 2% sobre los servicios digitales durante las recientes negociaciones con EE.UU., pero pudo asegurar un acuerdo comercial sin hacerlo.
Canadá, por su parte, abandonó su impuesto digital en junio, poco antes de que entrara en vigor. El cambio de rumbo tenía como objetivo aplacar a Trump y asegurar un pacto comercial más ventajoso, sobre todo después de que el presidente estadounidense tachara el impuesto de ataque "directo y descarado".
No es la primera vez que Trump amenaza con imponer aranceles a los países que graven los servicios digitales. En febrero, el presidente ordenó al representante comercial de EE.UU. que estudiara la reapertura de las investigaciones sobre estos impuestos.
Es probable que la amenaza de Trump de imponer "restricciones a la exportación de nuestra tecnología y chips altamente protegidos" también provoque inquietud en las empresas de semiconductores. A principios de este año, Nvidia y AMD acordaron ceder al Gobierno estadounidense el 15% de los ingresos de las ventas de chips en China a cambio de licencias de exportación.