Los profesionales de la administración pública reclaman un aumento salarial, el desarrollo de su carrera y la defensa de los servicios públicos, entre otras cuestiones.
La huelga nacional de la administración pública convocada por el Frente Común para este viernes repercutió en diversos sectores de actividad, como la sanidad, la educación, el transporte público y la recogida de basuras, entre otros.
El Sindicato de Trabajadores de la Administración Local (STAL), en una nota publicada en su página web, informó que la huelga obligó al cierre de numerosos servicios en "la mayoría de los municipios y empresas municipales", como juntas parroquiales, obras, talleres, servicios de agua y saneamiento, escuelas, guarderías, transporte público urbano, piscinas, inspección, bibliotecas, sectores operativos, tesorerías y servicios de atención al cliente y administrativos.
La misma organización indicó también que hubo un "fuerte acatamiento" de la huelga en los servicios nocturnos de recogida de basuras, lo que provocó interrupciones del servicio en Loures, Moita, Palmela y Seixal. También hubo un acatamiento de cerca del 95% en Vila Franca de Xira, del 90% en Amadora, del 80% en Évora y del 71% en Barreiro, aunque hubo interrupciones en muchos otros municipios.
En las escuelas de Portugal, la huelga dejó a miles de alumnos sin clase en todo el país. De las 5.500 escuelas existentes en Portugal, unas 670 se vieron obligadas a cerrar, según la información facilitada por los sindicatos del sector a SIC Notícias.
Según datos preliminares facilitados al 'Diário de Notícias' por Joana Bordalo e Sá, presidenta de la Federación Nacional de Médicos (FNAM), organización que también convocó huelga para este viernes, la adhesión global a la iniciativa fue de alrededor del 80% entre estos profesionales sanitarios, aunque hubo "una adhesión del 100% en varias unidades de salud familiar del país y en los quirófanos".
El Frente Común reivindica "la mayor huelga de los últimos años"
En un comunicado difundido este viernes, el Frente Común asegura que ésta "ha sido la mayor huelga de trabajadores de la Administración Pública de los últimos años".
La organización también señaló que hubo una participación del 80% "en términos generales" y "en torno al 90 por ciento" en sanidad, educación, seguridad social, hacienda y justicia, "con cientos de servicios cerrados y otros muchos cientos trabajando sólo con servicios mínimos".
Entre las principales reivindicaciones del Frente Común, que motivaron la movilización de la huelga, figuran el aumento salarial, la carrera profesional, la defensa de los servicios públicos, la recuperación de los vínculos públicos y la derogación del SIADAP, el "sistema integrado de gestión y evaluación del desempeño en la administración pública".