Human Rights Watch denuncia expulsiones ilegales y abusos en la frontera entre Polonia y Bielorrusia y exige que Polonia respete los derechos de los solicitantes de asilo.
En la frontera entre Polonia y Bielorrusia se están produciendo violentas expulsiones ilegales de solicitantes de asilo, según ha revelado un informe de Human Rights Watch.
El documento, basado en entrevistas en profundidad realizadas en noviembre de 2024 a 22 solicitantes de asilo, afirma que los agentes fronterizos polacos impiden a las personas que llegan de Bielorrusia solicitar asilo, incluso después de haber cruzado a territorio polaco. Esto incluye casos en los que los agentes fronterizos polacos detuvieron a inmigrantes varios kilómetros dentro de Polonia.
Algunos migrantes entrevistados habían sido obligados a firmar un documento, cuyo contenido no entendían, y fueron expulsados inmediatamente del país, empujados hacia las vallas, afirma el informe. Los migrantes descubrieron más tarde que el documento decía que la persona no quería solicitar asilo, según se afirma.
Cuando regresan al lado bielorruso de la frontera, las personas a menudo soportan duras condiciones al aire libre o sufren abusos por parte de funcionarios bielorrusos, que con frecuencia les obligan a regresar a Polonia, afirma Human Rights Watch en el informe.
Según el derecho internacional, los nacionales de terceros países que entran en la UE tienen derecho a solicitar protección y los procesos de solicitud deben estudiarse individualmente. Desde que Donald Tusk asumió el cargo de primer ministro de Polonia en diciembre de 2023, se restableció una zona militar a lo largo de un tramo de 60 kilómetros de la frontera con Bielorrusia.
ONGs: Polonia ha bloqueado la vigilancia independiente
La ONG acusó a las autoridades polacas de bloquear la vigilancia independiente y la ayuda humanitaria a las personas varadas en el bosque de Bialowieza. En febrero, el Gobierno polaco informó de haber rechazado a más de 6.000 personas entre principios de julio de 2023, cuando comenzó a hacer un seguimiento de estas acciones, y mediados de enero de 2024.
"Polonia ha adoptado recientemente una estrategia migratoria integral. Esto incluye hacer frente a los riesgos, así como visados humanitarios o apoyo a las personas necesitadas. Los derechos humanos son una prioridad para el Gobierno polaco, y también lo es la seguridad de los polacos y los europeos", declaró a 'Euronews' un portavoz de las autoridades polacas.
"La situación en la frontera oriental de la UE es excepcional, donde los regímenes dictatoriales organizan presiones para desestabilizar la UE. Somos testigos del contrabando de personas, de los ataques a los guardias fronterizos", dijo el portavoz. "No son Putin ni Lukashenko quienes deben decidir quién entra en la UE", añadió el portavoz.
"Los retrocesos de Polonia violan la legislación nacional y de la UE, así como los principios básicos de humanidad", afirmó Lydia Gall, de Human Rights Watch. Instó a Polonia, como próxima presidencia rotatoria de la UE, a dar ejemplo protegiendo los derechos de los solicitantes de asilo y garantizando un trato humano.
La Comisión "condena los ataques híbridos de Rusia"
Un portavoz de la Comisión Europea declaró que "condena los ataques híbridos orquestados por Rusia y Bielorrusia en nuestras fronteras exteriores, y es imperativo proteger la seguridad y la integridad territorial de nuestra Unión y de nuestros ciudadanos".
Sin embargo, el portavoz también afirmó que "la migración debe gestionarse de forma digna y humana" y que "una gestión eficaz de las fronteras en este contexto debe estar firmemente arraigada en el respeto de los derechos fundamentales".
El miércoles, los comisarios europeos presentarán una comunicación sobre la lucha contra las amenazas híbridas y el refuerzo de la seguridad en las fronteras exteriores de la UE. Se trata de una respuesta a las recientes acciones de Bielorrusia y Rusia, que han facilitado la llegada de solicitantes de asilo a la UE desde sus territorios, un hecho que Bruselas y los Estados miembros han calificado de "amenaza híbrida".
En octubre, el Gobierno polaco anunció una estrategia migratoria, aún pendiente de aplicación, que incluye una "suspensión temporal del derecho de asilo" por motivos de seguridad nacional, citando el papel de Bielorrusia en el uso de la migración como medio para crear "inestabilidad" política en Europa.
Antes del 12 de diciembre, los Estados miembros europeos deben presentar a la Comisión los planes de aplicación del pacto migratorio, un conjunto de expedientes legislativos aprobados durante la pasada legislatura, que regularán los procedimientos fronterizos para las personas que lleguen al territorio de la UE en busca de asilo.