El coste de las viviendas en países como Hungría y Estonia se ha triplicado. Solamente un país de los 27 ha registrado un descenso significativo.
Según las últimas cifras de Eurostat, la UE se enfrenta a una continua tendencia al alza de los costes de la vivienda. En los tres últimos meses de 2024, los precios de la vivienda subieron en toda la UE un 4,9%, mientras que los alquileres aumentaron un 3,2% en comparación con el mismo periodo de 2023.
En 2024, los precios de la vivienda aumentaron menos que la inflación en siete países de la UE (Alemania, Francia, Luxemburgo, Austria, Rumanía, Finlandia y Suecia), pero la superaron en todos los 20 Estados miembros restantes.
Entre 2010 y 2024, los precios de la vivienda aumentaron más que los alquileres a escala nacional en 21 países de la UE. En el mismo periodo, los precios de la vivienda se triplicaron con creces en Hungría (+234%) y Estonia (+228%).
Mientras tanto, los precios de la vivienda aumentaron más del doble en Lituania (+187%), Letonia (+153%), República Checa (+142%), Portugal (+120%), Bulgaria (+115%), Austria (+112%) y Luxemburgo (+105%). Italia fue el único país donde los precios de la vivienda disminuyeron durante este periodo, con una caída del 4%.
Durante el mismo periodo, los alquileres aumentaron en 26 países de la UE, registrándose las mayores subidas en Estonia (+212%), Lituania (+175%) y Hungría (+114%). Grecia fue el único país donde disminuyeron los precios de los alquileres, con una caída del 13%.
Las variaciones entre el centro y la periferia o entre regiones
Sin embargo, la tendencia general puede ocultar importantes variaciones regionales. En Alemania, por ejemplo, los precios han bajado más en el centro de las ciudades que en los barrios periféricos. Las siete mayores ciudades alemanas -Berlín, Düsseldorf, Fráncfort del Meno, Hamburgo, Colonia, Múnich y Stuttgart- experimentaron diferencias significativas en el comportamiento de los precios de los pisos entre 2023 y 2024.
Desde 2022, los precios de la vivienda en el centro de la ciudad de Hamburgo han caído un 17,8%, mientras que los de las afueras experimentaron un descenso de solo el 11,8%. Del mismo modo, las zonas céntricas de Düsseldorf experimentaron una caída del 17,5%, frente a un descenso del 12,4% en los barrios no céntricos. Los expertos sugieren que la evolución de las preferencias en materia de vivienda y el aumento del trabajo a distancia pueden estar influyendo en estos cambios.
"La subida de los tipos de interés desde 2022 puede haber llevado a los compradores a buscar propiedades más arriesgadas pero de mayor rentabilidad fuera de los centros urbanos", afirma Jonas Zdrzalek, experto inmobiliario del Instituto de Economía Mundial de Kiel. "Además, es posible que menos grupos de compradores puedan permitirse pisos caros en el centro de las ciudades debido a la pérdida de salario real relacionada con la inflación".