Con un nuevo techo financiero de 100.000 millones de euros para 2025, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) pretende invertir en Defensa, redes energéticas y tecnología.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) está reforzando su papel como brazo financiero de la Unión Europea. El límite máximo de financiación del BEI para este año ha alcanzado los 100 000 millones de euros, un nuevo récord.
En un contexto de tensiones geopolíticas, el Banco confirma su compromiso con la Defensa y la seguridad triplicando sus préstamos. El BEI tiene previsto dedicar el 3,5% de la financiación total al sector militar. La institución menciona 32 proyectos emblemáticos en tramitación. Estos anuncios validan la ampliación en los últimos meses del mandato de seguridad del BEI, que marca un cambio de paradigma en la misión de la institución.
Este apoyo estará disponible para todas las empresas de la UE: públicas y privadas, grandes y pequeñas. "Financiamos al sector público cuando se trata de infraestructuras para grandes cuarteles militares.
Esta misma semana hemos conseguido el visto bueno para financiar una infraestructura muy importante en Lituania, un cuartel militar que albergará una brigada del Bundeswehr (ejército alemán) muy cerca de la frontera bielorrusa", explica Nadia Calviño, presidenta del BEI.
"También estamos financiando a grandes empresas privadas para programas de investigación y desarrollo en los ámbitos de la innovación y la capacidad industrial", prosigue. También afirma que está trabajando con la Comisión Europea para identificar otras infraestructuras clave para la movilidad militar.
La prioridad climática
El compromiso del BEI con la Defensa no significa, sin embargo, un giro completo. El cambio climático y las energías limpias siguen siendo prioridades. De hecho, para el Banco Europeo la acción por el clima va de la mano de la seguridad europea.
Por ello, el Banco pone en marcha un nuevo programa de inversión en tecnología e innovación: TechEU. El programa aportará 70.000 millones de euros en capital, cuasicapital, préstamos y garantías del Grupo BEI entre 2025 y 2027. También recurrirá al capital privado para generar al menos 250.000 millones de euros de inversión. La primera oleada de proyectos TechEU se dedicará a las industrias limpias.
"Se trata de los productos necesarios para construir redes energéticas. Se trata de garantías para los innovadores de tecnologías limpias. También tenemos que apoyar a la industria eólica y el despliegue de los acuerdos de compra de energía, que son esenciales para estabilizar los precios de la energía para las grandes industrias europeas", explica Nadia Calviño. La presidenta del BEI subraya que la transición verde y la tecnología también contribuyen a la autonomía estratégica de la UE.