Un incendio forestal cerca de Marsella ha provocado la suspensión de vuelos, cierre de autopistas y la interrupción del tráfico ferroviario. Más de 700 bomberos combaten las llamas, que ya han afectado más de 500 hectáreas.
Los vuelos hacia y desde Marsella han sido suspendidos este martes y el tráfico en la principal estación de tren de la ciudad también se ha visto interrumpido debido a un incendio forestal que amenaza la ciudad portuaria del sur de Francia.
Las autoridades han instado a los habitantes de las zonas afectadas a permanecer en interiores y evitar las carreteras. Con el fuego acercándose a Marsella, también han recomendado a los residentes del norte de la ciudad mantener las ventanas cerradas para evitar la entrada de humo tóxico en los hogares.
Imágenes de televisión en vivo mostraban una capa de humo ligero sobre el antiguo puerto de Marsella, mientras aviones cisterna intentaban sofocar el fuego en las afueras de la ciudad, que cuenta con unos 900.000 habitantes. Más de 700 bomberos, siete aviones, tres helicópteros y 68 vehículos terrestres han sido desplegados para combatir el incendio, que se desató cerca de la localidad de Les Pennes-Mirabeau cuando un vehículo se incendió, y ha afectado más de 500 hectáreas.
Trenes suspendidos y hospitales en alerta
El aeropuerto de Marsella anunció el cierre de su pista alrededor del mediodía, y tramos de dos autopistas principales fueron cerrados al tráfico. La operadora ferroviaria SNCF suspendió la circulación de trenes entre Marsella y la estación de alta velocidad Miramas-Aix TGV, debido a la proximidad del fuego a las vías en L'Estaque, un pintoresco barrio de Marsella.
Como medida de seguridad, el Hospital Nord de la ciudad pasó a funcionar con generadores "debido a microcortes eléctricos". "El objetivo es asegurar el área de diagnóstico por imagen. No estamos preocupados, ya que contamos con un alto nivel de autonomía", informaron los Hospitales Universitarios de Marsella, agregando que debido a los cortes en el tráfico se pidió a los trabajadores que no abandonaran sus puestos hasta el relevo.
Varias semanas de olas de calor combinadas con fuertes vientos han elevado el riesgo de incendios forestales en el sur de Francia, donde ya se han registrado varios en los últimos días. Por el momento, las llamas no han causado víctimas, pero nueve bomberos han resultado intoxicados y una persona ha sido trasladada al hospital con una herida en el hombro.