A finales de febrero, Madrid se despedía de una familia de pandas, amadrinados por la Reina Sofía, que llevaba años en la ciudad y que emprendieron su viaje de vuelta a China. Durante su viaje del gigante asiático a España han estado acompañados por uno de sus cuidadores y un veterinario, según informó el Zoo en un comunicado.

A su llegada al aeropuerto de Barajas, les esperaba el equipo de Veterinaria y Conservación del Zoo de Madrid y varias patrullas del SEPRONA de la Guardia Civil. La Policía Municipal escoltó a los animales: el zoo madrileño tiene unas nuevas estrellas.