La Policía lanzó múltiples ráfagas de gas lacrimógeno mientras los manifestantes arrojaban piedras y botellas, y encendían fogatas bajo un paso elevado cerca del complejo fuertemente custodiado.
Las autoridades bloquearon las carreteras circundantes y las autopistas de peaje que conducen al edificio del Parlamento, provocando una grave congestión de tráfico, mientras más de 1.200 agentes de seguridad fueron desplegados.
Las protestas siguen a los informes de que 580 legisladores han recibido beneficios mensuales de vivienda de 50 millones de rupias (2.841 euros), casi veinte veces el salario mínimo en las regiones más pobres.