El número de muertos por un corrimiento de tierras en el Valle del Rift de Kenia ha aumentado a 26, mientras las inundaciones repentinas han interrumpido las labores de rescate.
Las autoridades señalan que 25 personas siguen desaparecidas después de que las carreteras quedaran arrasadas en la zona de Chesongoch.
Las lluvias torrenciales siguen azotando el oeste de Kenia y han dejado a miles de desplazados.
El Gobierno ha desplegado aeronaves militares para entregar suministros y exámenes a las escuelas incomunicadas, y ha prometido asumir los gastos médicos de más de 30 vecinos heridos y reubicar a quienes perdieron sus hogares.