La entrada en vigor del derecho a desconectarse fuera de las horas de trabajo cumple su primera semana en Francia .
La entrada en vigor del derecho a desconectarse fuera de las horas de trabajo cumple su primera semana en Francia . La medida obliga a las grandes empresas a regular el uso de las tecnologías de comunicación para garantizar el tiempo de descanso y de vacaciones de sus empleados. Algunos expertos dudan de su efectividad:
- “Los ejecutivos no se atreven a admitir que están hartos del presentismo y de estar accesibles en todo momento. Hacerlo, a día de hoy, sería pegarse un tiro en el pie en su carrera profesional. Así que no reconocen lo que está sucediendo y lo difícil que es”.
Los trabajadores de la empresa pública de correos La Poste, llevan un año disfrutando del derecho a desconectar. Para Didier Chabanne, empleado de La Poste, el balance es claramente positivo:
- “Conozco a colegas que estaban soportando una gran presión. El hecho de que ahora estén protegidos por escrito les da herramientas para decir “no, ahora no puedo responder”. Y todos ganan con esto, porque si los empleados pueden decir basta, esto les permite recuperarse y ser mucho más productivos para la empresa”.
La normativa francesa, que reconoce un derecho del trabajador que los usos y costumbres de muchas empresas han dejado en papel mojado, estaba contemplada dentro de la polémica reforma laboral aprobada por el Gobierno socialista.