El presidente de EE.UU. ataca por primera, vía Twitter, al fiscal especial que investiga la trama rusa.
La investigación de Robert Mueller debe llegar hasta el final. El fiscal especial debe poder trabajar sin interferencias. Esta ha sido la reacción de los senadores republicanos a los ataques de Donald Trump al equipo de Mueller que investiga la supuesta injerencia rusa en las presidenciales estadounidenses de 2016.
El congresista republicano Trey Gowdy, miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, daba este consejo a Trump:
"Cuando eres inocente, cuando hay acusaciones de colusión con los rusos, y no hay pruebas de ello, y eres inocente, actúa como tal".
Un abogado de Trump pidió, el sábado, el cierre de la investigación, por considerar que fue "manufacturada" por el exdirector del FBI, James Comey, y el exsubdirector, Andrew McCabe, despedido este viernes, a dos días de jubilarse, por una supuesta "filtración no autorizada a un medio de comunicación".
Muller, que lleva meses investigando la trama rusa, había sido intocable hasta que este fin de semana, cuando Trump arremetió contra él y su equipo, vía Twitter.
"La investigación de Mueller nunca debería haber empezado, porque no hubo conspiración y no hubo crimen. Se basó en actividades fraudulentas y en un falso dossier financiado por la Corrupta Hillary (Clinton)".
Poco después, un abogado de la Casa Blanca aseguraba que "el presidente no está considerando ni hablando de despedir al fiscal especial Robert Mueller".