El ciclista esloveno araña unos segundos a los favoritos y ocupa la tercera plaza de la clasificación general provisional dejando fuera del podio al británico Chris Froome
El Tourmalet es un coloso, y colosal ha sido la victoria del esloveno Primoz Roglic en la decimonovena etapa del Tour de Francia que ha pasado por este mítico puerto.
Roglic ha entrado por delante del maillot amarillo, el británico Geraint Thomas, dejando fuera del podio de la clasificación general provisional a Chris Froome que perdió tiempo.
Se mantiene entre los mejores el holandés Tom Dumoulin.
En la etapa reina de los Pirineos, Roglic sacó diecinueve segundos a sus perseguidores.
La suerte está echada. Todo se decidirá este sábado en la contrarreloj de 31 kilómetros por carreteras del País Vasco francés y final en Espelette.