La tensión aflora en la conmemoración del 15 aniversario de los atentados del 11-M

La solemnidad y la unidad han marcado en Madrid el inicio de los actos de conmemoración del quince aniversario de los atentados yihadistas del 11-M. En la Puerta del Sol, el presidente del Gobierno, el de la Comunidad de Madrid y la alcaldesa de la capital han llevado una corona de flores a la placa en memoria de las 192 víctimas mortales del que fue el mayor ataque terrorista de la historia de España.
Poco después, en la estación de Atocha, uno de los lugares atacados aquel fatídico día, la unidad inicial se quebró durante una ceremonia en la que Eulogio Paz, el presidente de la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo, criticó al Partido Popular por tratar de obtener réditos electorales alimentando las teorías conspirativas sobre la autoría del atentado.
"Además de trabajar por la Justicia, la dignidad y la atención y el cuidado de las víctimas de los atentados yihadistas del 11-M, es necesario gestionar que los libros de la Historia de España, los libros de texto en las escuelas, institutos y universidades, no divulguen un relato del 11-M contaminado y tergiversado por las teorías conspirativas", afirmó Eulogio Paz.
El candidato popular a la alcadía de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, abandonó el acto a modo de protesta. Y el líder de la formación a nivel nacional, Pablo Casado, pidió que se desclasifique cualquier información sobre los ataques y "se llegue a la verdad".
No lejos de allí, en el bosque del Recuerdo del parque del Retiro, se lanzaron 192 globos blancos, uno por cada fallecido.