Alerta máxima de la OMS en Kenia y Somalia

En Kenia la Organización Mundial de la Salud se ha decantado por hacer pruebas masivas en un estado sin sistema de asistencia sanitaria pública efectivo.
Los suburbios de Nairobi, sin alcantarillas ni recogida de basuras, son zona de alto riesgo. Mantener la distancia física está fuera de la realidad diaria.
Monica Wairimu, vecina de la barriada Kawangware, en Nairobi, explica:"En estos días estoy vendiendo una cuarta parte de lo que solía vender. Este virus ha empeorado las cosas porque no puedo pagar el alquiler e incluso los niños se han convertido en una carga financiera por culpa de esta enfermedad. Espero que me hagan la prueba , si resulto ser negativo, espero que la vida mejore para mí y para mi trabajo".
Vecina a Kenia, Somalia sufre la enfermedad en un previo estado endémico de guerra y la presencia de malaria y cólera.
El estado somalí no ejerce un control efectivo de gran parte del territorio nacional, devastado por una guerra intermitente con milicias islámicas.
Y además sequía, plaga de langosta; lavarse las manos es un imposible cuando el agua está contaminada.
En campos de refugiados, como Jawle 2, las perspectivas son bastante preocupantes, una residente, Halima Abdia, describe la situación:"Estamos hacinados, dormimos muchos juntos en una sola colchoneta. Hay dos o tres familias que viven juntas en un pequeño refugio. Hay personas sin hogar y el campamento está congestionado.tenemos la impresión de que no hay ningúna forma de escapar, no hay forma de controlarlo. Es realmente impactante ".
No hay cifras creíbles de contagios y fallecimientos. El sistema de salud público en Somalia es inexistente y los hospitales en pie están colapsados.
El sur de Somalia es la parte de mayor riesgo según la OMS una autentica "bomba sanitaria" sin medios de contención.